Angélica Enciso L.
Martes 26 de abril de 2011, p. 34
En México, alrededor de 50 por ciento de las emisiones de contaminantes al agua corresponden a centrales eléctricas a base de combustibles fósiles, que contienen metales pesados como níquel, plomo y cromo,
extremadamente tóxicos para la salud humana y el medio ambiente acuático, advierte el informe Emisiones y transferencia de contaminantes en América del Norte, elaborado por la Comisión de Cooperación Ambiental de América del Norte.
El documento presenta los datos del registro de emisiones y transferencia de contaminantes (RETC) que se aplica a alrededor de 35 mil industrias de Canadá, Estados Unidos y México, pero en este caso evalúa la generación de contaminantes a los cuerpos de agua superficiales.
El análisis tomó la información del RETC de alrededor de 5 mil plantas industriales de Canadá y Estados Unidos, las cuales registraron emisiones a lagunas y ríos por 228.5 millones de kilogramos en 2006, último año del que se tiene información.
Detalla que el sector público de tratamiento de aguas residuales sólo dio cuenta de 44 por ciento de las emisiones totales ese año, la mayor parte corresponde a establecimientos de Canadá, ya que en Estados Unidos las plantas de tratamiento públicas están exentas de presentar registros y en México muy pocas instalaciones presentaron sus reportes del RETC.
Indica que dos de los 256 contaminantes emitidos al agua –compuestos nitrados y amoniaco– representan 90 por ciento del total. Éstos contribuyen a las concentraciones de nutrientes en lagos y ríos, lo que provoca la eutrofización.
Agrega que en México el sector de extracción de petróleo y gas registró cero emisiones de ácido sulfhídrico en 2006; sin embargo, este sector y esta sustancia también están fuera de los registros.