Carlos Fernández-Vega / México SA
La versión oficial asegura que la deuda del sector público no sólo "es manejable", sino que su nivel "es bajo en términos relativos a otros países similares e incluso a países desarrollados". Qué bueno, pero el problema comienza cuando los mexicanos se enteran que son ellos, quiéranlo o no, los que pagan el voluminoso débito, y no "otros países".