Carlos Fernández-Vega / México SA
Perdida en el laberinto de la burocracia gubernamental y parlamentaria, la supuesta
voluntad políticapara incrementar
sustancialmenteel salario mínimo se mantiene en el cómodo
olvido, mientras el poder adquisitivo del ingreso sigue a la baja. ¿Dónde quedaron las
iniciativaspara corregir el
error?