9 septiembre 2017 | Martín Esparza Flores | Siempre!

Desde marzo pasado trascendió que el IFT había fallado para que la telefónica más importante del país fuera dividida para dar paso a la marca que ya se publicita en los medios denominada Macronet. En una primera instancia, Slim señaló que la decisión la había tomado el Instituto tras determinar la preponderancia de Telmex imponiéndole la obligación de crear dos empresas; una bajo un esquema corporativo y otra de usuarios básicos.
Tal situación puso en guardia al gremio de los telefonistas que exigieron ser tomados en cuenta en los nuevos proyectos, pues la partición afectaría directamente los derechos laborales de unos 35 mil trabajadores en activo y 20 mil jubilados, al pretender aplicar modificaciones sustanciales al Contrato Colectivo de Trabajo y al régimen de pensiones y jubilaciones.