jueves, 15 de febrero de 2018

Contratos amañados en el nuevo aeropuerto... El Toque Crítico de Martín Esparza

10 febrero 2018 | Martín Esparza Flores | Siempre!
El otorgamiento de los contratos para diversas obras que se realizan en el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) debe revisarse con lupa; desde su arranque hay la presunción de serias irregularidades que han pasado por alto los lineamientos de transparencia establecidos en la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados con las Mismas, así como de otras disposiciones que al no cumplirse han dejado fuera a muchas empresas, pese a haber cumplido con todos los requisitos de ley.

El sello de la opacidad ha aparecido nuevamente en el proceder del Grupo Aeroportuario de la Ciudad (GACM), dirigido por Fernando Patiño Márquez, organismo estatal encargado de ejercer el presupuesto de 186 mil millones de pesos que costará la obra, luego de haber incrementado su costo inicial de 169 mil millones y que en una de sus primeras etapas, en 2015, adjudicó 50 contratos por 1,623 millones, de los cuales solo nueve se otorgaron por licitación pública y el resto por invitación restringida o adjudicación directa. Es decir, de manera discrecional y contraria a lo estipulado en las leyes anticorrupción.


La Cooperativa LF del Centro participó en la licitación lanzada por GACM para construir la red de distribución eléctrica del NAICM, así como las subestaciones y el cableado estructurado, cumpliendo con todos los requisitos técnicos, económicos y financieros solicitados, en tiempo y forma. Pero al final, y de acuerdo con lo contenido en la versión estenográfica del organismo, la dejaron fuera por un supuesto requisito del IMSS.

SME-ANUEE. "Energía y Rosas"

Energía y rosas
Por Cinzia Arruzza | Traducido del inglés por Peter Gellert | Socialista Revolucionaria.org
El 11 de noviembre, cientos de personas de la Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica (ANUEE) de México se reunieron para un evento sobre el nuevo movimiento feminista en el auditorio del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME). Es un edificio con una larga historia de combate, con un mural colosal de José David Alfaro Siqueiros, que trabajó en este “Retrato de la burguesía” entre 1939 y 1940, hasta que se vio obligado a huir del país después de participar en un intento de asesinar a León Trotsky.

En 1936, el SME obtuvo una gran victoria contra su patrón, la compañía Mexicana de Luz, una empresa británico-canadiense, a través de una huelga que cortó toda la energía eléctrica en la Ciudad de México. Después de la nacionalización de la industria energética en 1960, el sindicato se convirtió en un punto de referencia para el sindicalismo radical y políticamente independiente, y en los últimos años promovió la creación de la Nueva Central de Trabajadores (NCT) y de una nueva coalición política, la Organización Política del Pueblo y los Trabajadores (OPT), actualmente involucrada en la campaña presidencial de una mujer indígena respaldada por zapatistas, María de Jesús Patricio Martínez.

En 2009, el SME llamó a los usuarios de la energía a movilizarse contra la privatización del sector energético, lo que ya había provocado alzas en las tarifas de electricidad que se volvieron imposibles de pagar. En 2010 la ANUEE se creó en respuesta a esta llamado. La lucha por la energía pública y accesible se remonta a la década de 1990, cuando el gobierno de Salinas de Gortari privatizó el 40 por ciento de la generación de energía, abriendo el mercado energético de México a compañías transnacionales con sede en España.

SME. Invitación a jubilados a SUBACE