
MÉXICO, D.F. (apro).- Ampliar seis meses más la colaboración del
Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), integrar un
equipo de expertos de alto nivel para un peritaje y aseverar que la
averiguación previa no está cerrada, fueron algunos de los “compromisos”
asumidos por el presidente Enrique Peña Nieto en la reunión sostenida
hoy con los padres de los normalistas desaparecidos en Iguala, Guerrero.
Sin descalificar por completo “la verdad histórica”, Peña Nieto recibió formalmente el informe del GIEI y fue reiterativo en afirmar que la averiguación sigue abierta, que se incorporará a la misma el mencionado reporte y que se instruirá un nuevo peritaje.
Por su parte, los padres de normalistas, que entregaron un
pliego de ocho exigencias, se fueron sin respuesta, pues sólo obtuvieron
de Peña Nieto la instrucción a sus colaboradores para que analizaran la
viabilidad de cada uno de los reclamos y responderles en alguna fecha
indeterminada.
La serie de propuestas planteada por el mandatario
y sus colaboradores fue, en realidad, una reiteración de diferentes
acciones ya anunciadas, y consisten en la instrucción de investigar
todos los hallazgos relacionados con lo ocurrido el 26 de septiembre de
2014; incorporar a la averiguación previa las conclusiones del GIEI, de
la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH); descubrir qué
pasó con cada uno de los desaparecidos; garantizar el acceso a todos los
mecanismos de atención a víctimas y cobertura médica a quienes
resultaron lesionados, así como crear una nueva fiscalía especializada
en búsqueda de desaparecidos.
Durante más de una hora, los 110
asistentes a la reunión –entre padres y familiares de los estudiantes,
defensores de derechos humanos, e integrantes del GIEI– esperaron el
arribo del mandatario para una cita que inició con media hora de retraso
y se prolongó por dos horas y media, en el Museo Tecnológico de la
Comisión Federal de Electricidad (CFE), ubicado en la Segunda Sección
del bosque de Chapultepec, cuyas inmediaciones fueron aseguradas con un
tumultuoso dispositivo de seguridad, al igual que la residencia oficial
de Los Pinos.
Peña Nieto estuvo acompañado por el secretario de
Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; la titular de la Procuraduría
General de la República, Arely Gómez y por el jefe de la Oficina de la
Presidencia de la República, Francisco Guzmán, así como por
subsecretarios del ramo y subprocuradores.
En la reunión también
participaron el comisionado nacional de Seguridad, Renato Sales; mandos
policiacos y responsables de atención a víctimas del gobierno federal.
En el encuentro destacó la presencia del ‘ombudsman’ Luis Raúl González
Pérez. También el hecho de que Peña haya recibido formalmente el
Informe de GIEI, sobre el que instruyó a la procuradora Arely Gómez sea
integrado a la averiguación previa.
El contenido de la reunión
–que se realizó a puerta cerrada– fue descrito por el vocero
presidencial Eduardo Sánchez, quien aseguró que, al inicio y al final de
la cita, el presidente Peña Nieto habría expuesto a los asistentes que
estaba “del mismo lado” que ellos, pues él y su gobierno quieren
encontrar la verdad.
Sánchez Hernández recordó que esta es la
segunda ocasión en que el presidente se reúne con las familias, a las
que les habría expresado su solidaridad, comprensión y apertura, luego
de hacer un recuento estadístico sobre reuniones, detenidos,
patrullajes, actuaciones ministeriales y otras acciones gubernamentales
en torno al caso.
Durante una sesión de preguntas, el vocero
presidencial fue renuente a exponer incidencias y pormenores de la
reunión, evitó emplear calificativos sobre el desarrollo y en todo
momento se remitió a la información de lo expuesto por el gobierno de la
República, argumentando que desconocía el contenido del documento que
entregaron las familias al mandatario.
Tampoco admitió responder
sobre la supervisión internacional que solicitan las familias; no tuvo
fecha, condiciones ni nombres relacionados con la creación de la nueva
fiscalía para desaparecidos, pues el anuncio “sucedió hace unos minutos”
y, respecto del avance de los diez puntos que Peña Nieto expuso a los
familiares en la reunión del 29 de octubre pasado, se limitó a decir que
a todos ellos se les ha dado seguimiento.
Además, a pregunta
expresa sobre el señalamiento del equipo de futbol Avispones, que se
vieron envueltos en la andanada de violencia la noche del 26 de
septiembre de 2014 y que ayer acusaron al gobierno de abandono, Eduardo
Sánchez aseguró que a todas las víctimas se les había brindado la
atención correspondiente.
Fuente: Proceso
Fuente: Proceso