“La crisis societal como generadora
de fenómenos de enfermedad mental, y las cooperativas y organizaciones
solidarias como alternativa laboral que promueve la construcción de
nuevos significados y sentidos de vida, capaces de producir un cambio en
la salud mental de individuos y sociedades ”
Psic. Gerardo Rubio, Secretario del Consejo de Administración, Cooperativa de Salud PANAMEDICA
Psic. Gerardo Rubio, Secretario del Consejo de Administración, Cooperativa de Salud PANAMEDICA
El presenta texto muestra una colección de reflexiones, planteamientos y datos, todos con soporte documental, orientados a construir una primera visión sobre el tema de la salud mental y psicosocial, en relación al contexto laboral actual, (se trata de un primer abordaje, un ensayo que está en proceso). Las reflexiones, planteamientos y datos, pretenden abonar a la hipótesis de que no se trata solo de un problema individual de salud mental, sino de los efectos a nivel individual y de orden social, de un sistema que por siglos ha colonizado y determinado las relaciones dentro del trabajo, la toma de decisiones, la ideología, el sistema sexo-genero, así como las relaciones que el hombre sostiene con la naturaleza, caracterizando a todas estas como relaciones de dominación y explotación.
Teniendo como consecuencia dos fenómenos macro:
1 a nivel planetario, el calentamiento global y el cambio climático,
producto de la sobre explotación del planeta. Y 2 en el estrato social,
una crisis generalizada del sentido de vida a nivel mundial. Teniendo
como síntomas esta última; el alza del 60% en la tasa de suicidios a
nivel mundial en los últimos 45 años, la depresión como un problema de
salud pública mundial que crese cada año, y el surgimiento de supuestos
“fenómenos” sociales como los llamados “NINIS”, que no son otra cosa que
el producto de la desocupación e inequidad social que produce el
sistema, y la “sobre calificación” de los jóvenes universitarios para
ocupar espacios en el campo productivo, entre otros.
A este panorama de descomposición social se
suma la creciente crisis económica mundial en la que estamos hace más de
40 años, y las contradictorias exigencias del discurso dominante de
éxito y bienestar, que orienta y mandata a todas las personas a ser
exitosos, jóvenes, y nos obliga a tener, vestir, parecer, comprar,
pensar, de formas que no corresponden con nuestras identidades y
realidades inmediatas. Generando en las personas grandes cargas de
frustración al no sentirse capases de alcanzar estas expectativas y
promesas sociales. Golpeando y trastocando con esto la identidad y la
autoestima de las personas, generando una sensación de minusvalía,
impotencia e inadecuación personal al no sentirse capaces de empatar su
realidad con las exigencias sociales, abriendo las puestas a una
escisión de la subjetividad. “¿Qué pasa con migo?, pues trabajo más de 8
horas y me esfuerzo continuamente, y no alcanzo a conseguir los logros y
las metas sociales” dice la gente en los consultorios.
Vivimos en una sociedad que busca todo el
tiempo negociar entre su realidad y las fantasías que el sistema propone
como metas y promesas sociales, fantasías en el sentido de que no hay
soporte material, una dinámica interna dentro del sistema, que se
oriente a lograrlas, abriendo con esto la puerta para la enfermedad
mental.
También nos planteamos en el texto: ¿Esta es la
única forma de vivir?, ¿se puede vivir de otra manera?, ¿hay otro mundo
posible?
Preguntas que nos hacemos frente a esta
realidad de crisis generalizada, de hambre y guerra. Al respecto
avizoramos que es imposible construir y concebir un mundo diferente si
seguimos actuando desde la racionalidad que mueve al capitalismo, la
cual es identificada como una lógica instrumental que persigue el logro
de la meta sin importar las formas que para ello haya que usar,
despegándose a si de la ética, con las consecuencias sociales que esto
trae, a la que denominamos racionalidad medios fines
Como alternativa se identifica al “buen vivir”
como un paradigma societal que guía su acción desde en una racionalidad
solidaria, basada en valores como la reciprocidad, la complementariedad,
la solidaridad, y la comunitariedad.
Se reconocen a las cooperativas como espacios
laborales al alcance de todos, que desarrollan su práctica cotidiana de
trabajo centrada en valores, solidarios semejantes a los del buen vivir.
Y se les ve como organismos laborales capaces de producir sentidos de
vida alternativos.
Finalmente la Cooperativa de Salud Panamedica
es un ejemplo vivo desde hace 8 años, de que es posible trabajar fuera
de la lógica capitalista de una manera digna, con un alto sentido ético y
de responsabilidad con los usuarios, la comunidad y la naturaleza, al
tiempo que no dañamos, si no que engrandecemos la calidad y el estilo de
vida de los asociados.
Así como los niños buscan límites,
Los datos sueltos piden a gritos ser interpretados.
Al respecto del suicidio, la depresión, los
NINIS, Y la tasa de desempleo rezan los informes de organismos
internacionales, y los periódicos locales de mayor prestigio México.
Depresión
“La depresión afecta entre el 12 y el 20 % a
personas adultas, que están entre los 18 y los 65 años… Las razones:
auto estima baja, estrés crónico, problemas económicos, salario menor,
falta de una pareja, o un trabajo insatisfactorio”
“Los estudios revelan que las mujeres sufren más depresión con 14.4 % que los hombres 8.9 %”
Suicidio
“En los últimos 45 años la tasa de suicidio ha
aumentado un 60% a nivel mundial…Uno de cada 10 intentos es concluido
colocando a México en el noveno lugar de muertes auto infligidas… en el
censo del INEGI DEL 2009 quedo asentado que en México se suicidaron 5190
personas, 4201 eran varones y 989 eran mujeres”
“La OMS establece que a diario se registran
3mil intentos de suicidio, en México aún no hay estadísticas claras,
pero la secretaria de salud, estima 14 mil intentos al año, sin
considerar los consumados”
“El suicidio es una de las primeras cusas de
defunción entre las personas de 15 a 44 años, estas cifras no incluyen
las tentativas inconclusas, que son 20 veces más frecuentes que los
casos consumados”
“Adolescentes y jóvenes entre 15 y 24 años
ocupan el primer lugar en sectores vulnerables, en segundo lugar se
ubican personas adultas y en tercero adultos mayores” (“Costo social de
los trastornos mentales” pro voz salud mental, en el portal de la
subsecretaria de prevención y promoción a la salud, spps.gob.mx)
Desempleo
“En las naciones de la OCDE hay 39 millones de NINIS, de estos México alberga a 7 millones”
“El rango de edad de quienes no estudian ni
trabajan va de los 16 a los 29 años…Las posibilidades de no encontrar
empleo son las mayores en este sector poblacional, incluso por encima de
los adultos”
“De estos uno de cada cuatro que logra ingresar
al mercado laboral, obtiene un contrato temporal, mientras 12% está
sobre calificado para la labor que realiza…Hacer frente a este escenario
demanda una amplia gama de competencias, cognitivas, sociales y
emocionales” (La jornada, 20/05/2015)
“…el escenario del mercado laboral que se
avizora para 2015, no es alentador para la búsqueda de progresos
sustanciales que generen mejoras en términos de pobreza y desigualdad
afirma Alicia Bárcenas secretaria ejecutiva de la CEPAL, Elizabeth
Tinoco directora regional de la OIT para América latina y el caribe”
“Se pronostica para este 2015, una caída en la
tasa de ocupación urbana –es decir, la relación entre la población
ocupada y el número de personas que integran la población en edad de
trabajar- en la región por tercer año consecutivo”
(“El desempleo en América Latina y el caribe sube un 0,2 puntos porcentuales en 2015” informe CEPAL-OTI, ilo.org)
2 vivimos una crisis generalizada que
no se centra en el terreno del trabajo, podemos hablar de una crisis
societal y de una crisis de sentido de vida.
Vivimos una crisis generalizada que no se
centra en el terreno del trabajo y la economía, a nivel social podemos
hablar de una crisis soecietal y de una crisis de sentido de vida a
nivel individual.
Las crisis
Según Lander, Estamos viviendo una crisis
económica, política, social, ecológica y cultural. Las formas de
producir del llamado capitalismo han puesto en jaque, no solo a las
personas, si no a la sociedad en su conjunto e incluso el planeta mismo
está en riesgo. Las exigencias de extracción y utilización que hacemos a
de la tierra sobre sus recursos naturales, rebasan la capacidad de
regeneración que esta tiene, estamos sobrecargando al planeta, con las
amenazas que esto implica (Lander, E. 2010)
En síntesis, Estamos asistiendo al desencantamiento del mundo (Germaná, C. 2002)
El reencantamiento del mundo no puede venir
desde una lógica como la del capitalismo, moderno, que promueve la
acción humana desde una lógica medios fines, donde el criterio es
obtener la mayor ganancia al menor coste, siempre en detrimento de la
naturaleza y del ser humano.
Esta lógica es la que nos ha llevado al lugar
en que nos encontramos en este momento, en medio de una crisis medio
ambiental, producto de la sobrecarga que hacemos del planeta, y a una
crisis de sentido, donde las personas trabajan todo el día, sin
satisfacer las necesidades básicas, lejos está pensar en un panorama de
satisfacción, estabilidad y trascendencia.
Esta lógica del capitalismo no solo ha puesto
en jaque al planeta, con el tema del calentamiento global, si no que ha
arrastrado a los seres humanos a una crisis de sentido, a la perdía del
sentido de vida. Ha colocado el valor en el dinero y la ganancia, se
idolatra las maracas, el cuerpo siempre joven, sin arrugas y sano, y una
larga lista de contradicciones, y sin sentidos, que han venido
configurando a lo largo del tiempo una profunda frustración social y una
confusión del sentido de vida.
Pues el cuerpo de modo natural cambia con los
años, y se deteriora, mientras el discurso de la ideología dominante nos
mandata, estar siempre jóvenes, bellos y sanos. En esta misma línea de
psicosis discursivo-practica se promueve lo natural mientras nos venden
productos industrializados…
Por otro lado se promueve una dinámica mundial
de sobre explotación del trabajo, que incluye la pérdida de derechos
laborales y humanos. Mientras contradictoriamente el discurso dominante,
nos exige el éxito, entendido como un éxito económico. Agudizando la
frustración, la depresión, el sentimiento de ser inadecuado, perdedor,
impotente ante el mundo.
La ideología dominante plantea metas sociales y
de estilo de vida, que están en oposición o que son imposibles de
conseguir desde la actual tendencia del desarrollo de las fuerzas del
capitalismo
Es necesario evidenciar que el capitalismo no
ha cumplido las promesas que ofrece: el estilo de vida americana, la
capacitación académica como recurso de movilidad social, han quedado
años atrás y son in alcanzables porque existe una política estructural
que camina a contra corriente, de tal suerte que se siguen vendiendo las
mismas promesas mientras construyen realidades sociales y económicas
distintas, en este sentido hay un adeuda del capitalismo con los
ciudadanos y un engaño latente.
La caída del modelo del “estado benefactor” en
los años setentas, ha dado al traste con estas promesas, el sistema
económico ya no está más interesado en sostener el grueso de la
seguridad social, y por el contrario se encuentra en un periodo de
desmantelamiento de todos los derechos sociales, de modo que la
estabilidad laboral, la seguridad social, están en proceso de
adelgazamiento y desaparición en todos el mundo, con las terribles
consecuencias que esto significa para la seguridad física, mental y
económica de los individuos, las familias y los pueblos.
3 de la colonialidad del capitalismo al
buen vivir como paradigma civilizatorio: la colonialidad del poder como
herramienta para vislumbrar nuevos horizontes.
Frente a esta realidad nos preguntamos ¿Otro mundo es posible?
Si miramos solo desde la lógica del capitalismo y su ciencia dominante, la respuesta es, no.
Porque desde esta lógica, no hay otra forma de
producir ni de establecer las relaciones sociales, es imposible un
capitalismo de crecimiento cero, y menos aún un capitalismo de
decrecimiento (Lander, E. 2010)
¿Desde dónde sí podemos visualizar un horizonte diferente?
Primero desde un abordaje teórico distinto, que
cuente con un aparato critico que permita cuestionar la supuesta
“normalidad y universalidad” de la vida que llevamos, y que finalmente
dé cuenta de otra manera de hacer las cosas.
Para esto nos acogeremos como mirada a la llamada teoría de la colonialidad del poder
Que nos permite entender este sistema, como una
forma más de ordenamiento social, una entre otras muchas que han
existido. Desde este enfoque se sitúa el surgimiento de este sistema
económico y social en 1492, y se le describe como de carácter mundial,
moderno y colonial (Marañon, B. 2012)
Mundial por que su manera de proceder, su práctica se extiende a los diversos continentes, América, Europa, áfrica, Oceanía.
Colonial, porque se basa en la dominación y
colonización de los 5 ámbitos más importantes de la vida social. Ha
colonizado el trabajo y sus relaciones, la naturaleza, es también sobre
explotada, se ha colonizado el conocimiento, pretendiendo una sola
interpretación del mundo, el llamado eurocentrismos, desde donde la
ciencia moderna justifica todas las acciones de explotación perpetradas
al hombre y la naturaleza, se ha colonizado también la relación
sexo-género y la toma colectiva de decisiones, (Marañon, B. 2012)
Desde esta mirada es posible identificar qué es
lo que está pasando en la sociedad actual, identificar los campos de
acción de la colonización, y establecer propuestas que permitan el
reencantamiento del mundo.
Y es en el buen vivir como propuesta
civilizatoria basada en una cosmovisión comunitarista, y solidaria, en
las organizaciones y colectivos que guían su acción desde estos
principios y valores, como son las cooperativas, mutualidades y otras
muchas formas organizativas a nivel laboral y social comunitario, que
vemos las posibilidades de construir un mundo diferente.
4 Las alternativas. Las cooperativas y
mutualidades, permiten la construcción de alternativas laborales y de
satisfacción de necesidades desde dentro de este sistema, con una visión
y una práctica que trasciende y nos permite construir el nuevo mundo.
Como decíamos las alternativas con capacidad de
transformar, solo pueden partir de una lógica distinta a la
racionalidad medios-fines, que caracteriza este capitalismo, moderno y
colonial
¿Dónde podemos encontrar una visión de mundo,
una cosmovisión que se base en otros valores?, que de manera natural sea
ecológica, racional en el uso de los recursos, que recicle y cuide la
naturaleza, que la respete. Y que respete también a los seres humanos,
que no los explote, en la que se vivan relacione simétricas, más que de
desigualdad de poder.
En esta búsqueda que nuestras sociedades
realizan por el continuo bienestar, encontramos en los pueblos de
América del sur la propuesta de “El buen Vivir”, este es un paradigma
societal que se guía por valores, como la solidaridad, la reciprocidad,
la complementariedad, y la comunitariedad.
Este paradigma no es conjunto de supuesto y
teorías, que se busque probar, sino una cosmovisión que ha guiado a los
pueblos indígenas a lo largo de su historia, y que hoy es llevado a
precepto constitucional en Bolivia y Ecuador, iniciando en ejercicio de
condensar lo mejor de la tradición indígena, con lo mejor del mundo
occidental y su democracia.
No pensamos que la alternativa sea regresara a
las formas de organización de las sociedades indígenas, tal como
existieron, ni tampoco pensamos que haya que no haya nada útil en el
llamado mundo occidental.
En sintonía con esta propuesta de retomar el
buen vivir y las sociedades democráticas, encontramos a las cooperativas
y mutuales, que son herramientas que permiten trabajar dentro del
capitalismo con una lógica basada en valores que re-dignifican y
devuelven el sentido de vida a las personas.
Las cooperativas operamos poniendo en práctica
los valores de solidaridad, apoyo mutuo, reciprocidad, respeto y
compromiso con nuestra comunidad y por la naturaleza.
Estas organizaciones productivas permiten la
satisfacción de necesidades materiales y sociales de una manera
racional, sin dañar a la naturaleza ni el tejido social, promoviendo la
construcción de lazos de apoyo mutuo y solidaridad entre quienes la
conforman y con las comunidades donde se asientan.
Restituyen el sentido original del trabajo,
como herramienta para la satisfacción de necesidades, permiten como
parte de un sistema más amplio, ponderar de manera critica las metas
sociales y los esfuerzos personales para lograrlas.
Permiten vivir el reconocimiento y valor
individual de sus socios y afiliados, pues tienen como principal
objetivo el priorizar a las personas por encima de la ganancia.
En síntesis podemos decir que favorecen en su
hacer cotidiano de trabajo y resolución de necesidades, la
reconfiguración de nuevos significados sobre el trabajo, las metas
sociales, la re- interpretación del mundo y sus sociedades, facilitando
la construcción de un nuevo sentido de vida acorde a su realidad.
La cooperativa de salud Panamedica, es un
ejemplo vivo con 8 años de existencia, facilitando la formación en la
práctica, de profesionales de la salud en economía solidaria, atendiendo
a sus usuarios con ética, calidad y calidez, brindando la posibilidad
de acercar servicios de salud como medicina, dental, psicología, óptica y
nutrición, masaje, rehabilitación física, ortesis y prótesis, al
público en general desde una dinámica de solidaridad y apoyo mutuo.
En esta experiencia podemos identificar como es
que, en las practicas humanas, es que se reflexionan, cuestionan,
construyen y re-construyen nuevos significados sobre la vida laboral,
sus sentidos, sus metas, y sus fines.
Bibliografía
Lander, E. 2010“estamos viviendo una profunda
crisis civilizatoria, en Revista América Latina en movimiento No. 452,
Quito, pp. 1-3.s
Marañon, B.(2012) “Solidaridad económica y
potencialidades de transformación en América latina, una perspectiva
descolonial”. Buenos aires: CLACSO. Pp. 21-58
Germaná, C. (2002) “la racionalidad en las
ciencias sociales”, Fondo Editorial de la Facultad de Ciencias Sociales,
Universidad Mayor de San Marcos. pp. 17-35