En realidad, los magnates petroleros mexicanos que presionan para conseguir la privatización de Pemex conforman una gran familia, encabezada, entre otros, por tres patriarcas que dirigieron la paraestatal. Se trata de Jesús Reyes Heroles, Luis Ramírez Corzo y Juan José Suárez Coppel, quienes fueron pródigos con la concesión de multimillonarios contratos a las empresas a las que se incorporaban como exfuncionarios o a las que pensaban asociarse cuando se hallaban al frente de Petróleos Mexicanos…
17 noviembre 2013 | Esteban David Rodríguez | Proceso
En realidad, los magnates petroleros mexicanos que presionan para conseguir la privatización de Pemex conforman una gran familia, encabezada, entre otros, por tres patriarcas que dirigieron la paraestatal. Se trata de Jesús Reyes Heroles, Luis Ramírez Corzo y Juan José Suárez Coppel, quienes fueron pródigos con la concesión de multimillonarios contratos a las empresas a las que se incorporaban como exfuncionarios o a las que pensaban asociarse cuando se hallaban al frente de Petróleos Mexicanos…
En realidad, los magnates petroleros mexicanos que presionan para conseguir la privatización de Pemex conforman una gran familia, encabezada, entre otros, por tres patriarcas que dirigieron la paraestatal. Se trata de Jesús Reyes Heroles, Luis Ramírez Corzo y Juan José Suárez Coppel, quienes fueron pródigos con la concesión de multimillonarios contratos a las empresas a las que se incorporaban como exfuncionarios o a las que pensaban asociarse cuando se hallaban al frente de Petróleos Mexicanos…
Los magnates petroleros mexicanos son como una gran familia:
Luis Ramírez Corzo, en su administración al frente de Pemex, otorgó contratos a GEA, de Jesús Reyes-Heroles; la gestión de éste dio contratos a Todco y a Jacobs, de Luis Ramírez Corzo y Juan José Suárez Coppel, respectivamente, y en el paso de cada cual por la dirección general de Petróleos Mexicanos (Pemex) hubo contratos para sus clientes y/o socios.
Son también los voceros de la privatización energética peñista, que lo mismo participan en los foros de Televisa-Nexos que en los foros del Senado para la discusión de las iniciativas que pretenden transferir al sector privado áreas de inversión exclusivas de Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Luis Ramírez Corzo y Hernández fincó su ascenso por las redes financieras del mercado energético a través de una cuestionada administración al frente de Pemex, y ahora resurge como uno de los profetas de la privatización peñista.
Su breve y redituable carrera pública se reduce a cuatro años con ocho meses, en los cuales acumuló una serie de acusaciones sobre conflictos de interés y la asignación discrecional de contratos de la petrolera pública a empresas privadas con las que estuvo ligado.
Jesús Reyes-Heroles
El caso más oscuro fue el de Solar Turbines, firma de la que Ramírez Corzo fue director. Después de una serie de resistencias por parte de la alta burocracia de Pemex –durante la gestión de Jesús Reyes-Heroles– a informar sobre los contratos asignados a esa empresa, el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI) ordenó a la paraestatal liberar la información y subirla al Portal de Obligaciones de Transparencia, como era su obligación, tras lo cual puede verificarse que, sólo con Pemex Exploración y Producción (PEP), entre 2003 y 2013 Solar Turbines ha sido beneficiada con 459 contratos por casi 30 mil millones de pesos, y de ellos 280 fueron suscritos durante el periodo en que Ramírez Corzo dirigió esa división y fue director general de la petrolera.
Pero en la zona de tolerancia de facto que ha sido la dirección general de Pemex, el multidenunciado Ramírez Corzo se dedicó a entablar relaciones que habrían de serle preciosas para sortear con fortuna el desprestigio público y reaparecer a principios de 2012 en los consejos ejecutivo y de administración de Integradora de Servicios Petroleros Oro Negro, Sociedad Anónima Promotora de Inversión (SAPI) de C.V., donde comparte asientos con exdirectivos de Televisa, así como con Gonzalo Gil White –director de la compañía– y Gonzalo Cañedo White, hijo y cuñado, respectivamente, del exsecretario de Hacienda Francisco Gil Díaz.
Oro Negro, a través de su filial Todco, goza ya de empatía con el gobierno peñista, pues de acuerdo con los contratos 421004824 y 421003823 suscritos con PEP, desde finales de abril pasado renta al menos dos plataformas de perforación marina en el Golfo de México a Pemex por 380 millones de dólares, una hasta el 2016 y otra hasta 2017, aunque pronto pueden llegar a ocho las plataformas rentadas.
Televisa Energy
Ante la expectativa de la privatización del sector energético, Integradora de Servicios Oro Negro, SAPI apareció en el mercado financiero mexicano en febrero de 2012 con un capital de 250 millones de dólares –según versiones de prensa–, y mientras Gonzalo Gil White actualmente conduce el consejo de administración, Luis Ramírez Corzo y Hernández es presidente del consejo directivo.
Este consorcio petrolero está conformado por Axis Capital Management, que condujo las salidas bursátiles de Televisa en las bolsas de valores de México y Nueva York, y que representó a la televisora de Emilio Azcárraga Jean en la compra del 50% de activos de la red satelital privada Panamsat; Ares Management, operadora estadunidense de inversiones basada en Los Ángeles con un capital registrado de 68 mil millones de dólares, y con actividad en Asia, Europa, Estados Unidos y México; y Temasek, otra promotora de inversiones originada en Singapur y con un portafolio de 157 mil millones de dólares.
Los consejos directivos y de administración de Oro Negro bien pueden definirse como una combinación equilibrada de exfuncionarios del sector financiero público y exdirectivos de Televisa. El propio presidente del consejo de la “integradora”, José Antonio Cañedo White, ingresó al consejo de administración de Grupo Televicentro, controladora de Televisa, el mismo día en que se incorporó a él Azcárraga Jean, el 22 de enero de 1991; y en la misma fecha en que Azcárraga Jean asumió la dirección de Grupo Televisa, Cañedo White ocupó la presidencia del consejo de Televicentro, el 3 marzo de 1997. Pero además Cañedo ha sido director de Mercados de Capital y Banca de Inversión de Nacional Financiera.
Otro miembro del consejo directivo de Oro Negro es Gilberto Perezalonso Cifuentes, CEO de Axis, quien ha sido miembro de los consejos de administración de Cintra, Aeroméxico y Volaris –la empresa que echó a volar el exsecretario de Hacienda, Pedro Aspe–, Banamex, Gigante, Telefónica Móviles, Southern Copper Corporation y Cablevisión, así como director de Corporación Geo y vicepresidente ejecutivo de Administración y Finanzas del Grupo Televisa.
El director de Administración y Finanzas de Oro Negro es Guillermo Nava Gómez-Tagle, quien ha sido vicepresidente de Banca de Inversión para Colombia y tesorero para México de Citibank, y también director administrativo y financiero de McKinsey en México, director de banca privada de Bank of America y vicepresidente de finanzas del Grupo Televisa.
En el consejo de administración de Oro Negro se encuentran igualmente Lorenzo González Bosco (Temasek), Roberto Rocha López, exdirectivo de Temasek y de Morgan Stanley; Nathan Whitecloud Walton (Ares, Stream Global Service Inc., Plasco Energy Group), Kevin Andrew Frankel (Ares), Kevin Ryan (Ares, Marietta Corporation), Frederick J. Warren (Brentwood Associates, General Television Inc.), Bernard Lambillote (Ecofin Limited) y Pablo Mijares Ortega, socio de la firma Mijares, Angoitia, Cortés y Fuentes, S.C., experta en fusiones.
Todco y el oro negro
En agosto de 2013, apenas seis meses después de iniciar operaciones, Oro Negro compró la operadora de plataformas petroleras en el golfo Todco México Inc. y su filial Servicios Todco, S. de R. L. de C.V., por 36 millones de dólares, según publicó en su sitio Morgan Lewis, representante del consorcio petrolero de Ramírez Corzo en la operación, junto con el despacho Creel, García-Cuéllar, Aiza y Enríquez, S.C.
Todco obtuvo sus primeras licitaciones con Pemex justamente en la gestión de Ramírez Corzo (PEP, 411003826, 411003835, 41003833, 411005822), que le significaron una capitalización por alrededor de mil 729 millones de pesos. Durante la gestión de Reyes-Heroles, Todco dobló su cuota, obteniendo contratos (421006833, 421007803, 421009817, 421008806, 4211009815) por 2 mil 678 millones de pesos, de los cuales unos 412 millones fueron bajo contratos de asignación directa.
Ya en la gestión de Juan José Suárez Coppel –otro exdirectivo de Televisa, donde fue tesorero corporativo—, Todco consiguió sólo dos contratos (421000806 y 421001840), que le aportaron ingresos por mil 300 millones de pesos; el último fue en 2011, y la operadora de plataformas no volvió a facturar a Pemex –al menos conforme a los registro del Portal de Obligaciones de Transparencia del Gobierno Federal– sino hasta 2013, durante la gestión de Emilio Lozoya Austin, es decir, hasta que pasó a formar parte de Oro Negro, rompiendo esta vez, con sólo dos contratos, todos sus récords de facturación: 4 mil 657 millones de pesos, es decir, 380 millones de dólares.
El caso Suárez Coppel
A partir del 29 de marzo de 2013, Juan José Suárez Coppel, otro de los nuevos príncipes petroleros mexicanos, es consejero independiente de Jacobs Engineering Group Inc., la empresa a la que habría destinado, como director de Petróleos Mexicanos (Pemex), más de mil 500 millones de dólares en contratos, según distintas versiones, aunque las verdaderas dimensiones de las relaciones económicas entre ambas entidades aún está por esclarecerse.
Sobre la relación de Jacobs con Pemex en general y con la gestión de Suárez Coppel en particular (2009-2012), no hay registros precisos, ya que la mayoría de los contratos para el conglomerado texano de infraestructura, inversiones y asesoría en petróleo, gas y azufre no aparecen en ninguna de las modalidades de las instancias de transparencia.
Por ejemplo, diversos reportes de prensa señalan que Jacobs Nederland BV, subsidiaria de la firma texana, suscribió en 2004 con Pemex Exploración y Producción un contrato por alrededor de 2 mil 500 millones de dólares para dar soporte de ingeniería a la plataforma Ku-Maloob-Zaap, y que en adelante contrajo nuevos compromisos con la petrolera mexicana para supervisar por cinco años 18 plataformas marinas en el Golfo de México.
Del mismo modo, se ha difundido, especialmente a partir del ingreso de Suárez Coppel al Comité de Nombramientos y Gobierno Corporativo de Jacobs, que su ya mencionada filial tiene otro contrato con Pemex Refinación, suscrito en 2012, “para la ejecución de los paquetes de diseño de procesos, licencias y asistencia técnica de la planta recuperadora de azufre de la nueva refinería de Tula”, pero no se menciona el número del contrato ni su monto.
La razón está en el hecho de que el 1 de octubre de 2012, cuando Pemex hizo el anuncio de las contrataciones mediante un boletín, no dio mayores detalles, como al parecer lo hacía con frecuencia el equipo de comunicación de Suárez Coppel. El boletín ya no se halla disponible en la base de datos.
Por otra parte, en febrero de 2012 Pemex anunció que el contrato de servicios de ingeniería y administración de esa refinería había sido ganado por ICA Fluor Daniel, el cual sería ejecutado en 421 días, por 135 millones de dólares. De acuerdo con la información de la paraestatal, ICA Fluor Daniel habría concursado en la licitación junto con otras empresas, entre ellas Nederlands B.V.
En mayo de 2012, en su resolución CIPGPB-015/2012 sobre la solicitud número 1857700003413, el Comité de Información de Pemex Gas y Petroquímica Básica señala que “se identificó la existencia de 12 contratos celebrados con las empresas ICA Fluor Daniel, S. de R.L. de C.V. en asociación con las personas morales Jacobs Nederland B.V. y Linde Process Plants Inc.”, pero sin precisar objetivos y montos de los mismos. Así pues, la solicitud de información está pendiente de resolución, pues ninguno de los montos se ha incorporado, como debería hacerse por ley, a los registros del Portal de Obligaciones de Transparencia del gobierno federal.
En contraste, sí aparecen registros de contratos, por montos menores, suscritos por Pemex Refinación con Jacobs Consultancy Inc., la división de gestión especializada y consultoría técnica de Jacobs Engineering Group Inc.
De 2006 a 2009, durante la gestión de Jesús Reyes-Heroles, Jacobs Consultancy cobró 384 mil 255 pesos en la ventanilla de la subsidiaria mencionada por los conceptos de “folletos, reglamentos, manuales y libros”, y “papelería y oficina” (contratos 4500195831, 4500230271, 4500269147, 4500304765).
Ya con Suárez Coppel, su posterior consejero, la referida división de Jacobs cobró por los mismos conceptos 233 mil 630 pesos (4500339722, 4500383708); y adicionalmente fue favorecida con la asignación de un contrato (RPSA05111P) para efectuar un “dictamen de factibilidad técnica económica y ambiental del proyecto de calidad de combustibles en su fase diésel” en la refinería de Cadereyta, por el cual cobró la consultora 2 millones 574 mil 233 pesos.
La consultora ha vuelto a surtir papelería a Pemex Refinación por 287 mil 264 (450 0427463, 4500468880) en la era Lozoya.