Especialistas en materia fiscal, laboral y de recursos humanos advirtieron que los trabajadores serán uno de los sectores más afectados por los cambios en materia hacendaria, luego de que legisladores acotaron a empresas la posibilidad de deducir las prestaciones
Luego de que la Cámara de Diputados aprobara cambios a la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y acotara la deducibilidad que tenían las empresas sobre los ingresos remunerativos otorgados a los trabajadores, especialistas en materia fiscal, laboral y de recursos humanos consultados por EL UNIVERSAL, consideraron que habrá un impacto en las prestaciones que las compañías otorgan a sus trabajadores y que hasta ahora se habían mantenido totalmente exentas del ISR.
En el peor escenario, los cambios a la ley del ISR pegarán a la previsión social y al ahorro de sus trabajadores, y además esto se traducirá en un costo de entre 8% y 9% adicional para las empresas, lo que desincentivará la generación de empleos y coartará la posibilidad de otorgar aumentos salariales en 2014, dijeron los especialistas.
En prestaciones como el reparto de utilidades, los vales de despensa, el fondo y cajas de ahorro, el aguinaldo, previsión social, horas extra y prima vacacional y dominical entre otras, hasta ahora exentos, sólo proceda la deducción de hasta 41% de dichas remuneraciones, revela el dictamen aprobado por la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados.
Irma Flores, directora general de Red Ring México, firma de consultoría y reclutamiento de personal, advierte que habrá afectaciones en la previsión social y en el ahorro interno del país. “En el tema de previsión social, lo que antes era deducible ya no lo será, lo están viendo ya con sus nóminas muchas empresas, ya no existirá el incentivo que tenían al deducir las prestaciones por previsión social, ahora se concretarán a otorgar sólo las prestaciones de ley”, alertó.
Por ejemplo, hoy la reforma propone eliminar la deducción de vales de despensa, a menos que se otorgue vía monederos electrónicos emitids por empresas autorizadas por el SAT y que se encuentren dentro de los límites de previsión social.
El fiscalista Alfredo Flores comentó que estas modificaciones fiscales ocasionarán un incremento en el costo de la nómina de las empresas entre 8% y 9%, debido a que el empresario enfrentará mayores costos impositivos, y por tanto menores utilidades.
Por su parte, el experto en derecho laboral Victor Madrid estimó que los cambios en el ISR afectarán la relación laboral entre muchos trabajadores y sus empresas, “varias de estas prestaciones están contenidas en sus contratos y éstas se encuentran a salvo, pero otras corresponden a condiciones generales de trabajo no escritas; si estas prestaciones se ven disminuidas o canceladas por el patrón, los trabajadores tendrán derecho a demandar a la empresa”.
Jorge Servín, director del área de retiro en la firma de capital humano Mercer y presidente de la Asociación Mexicana de Actuarios Contadores (AMAC), coincidió en que la reforma traerá como consecuencia que la generación de empleos se vea afectada debido a que se planteó pasar del 100% al 41% en las deducciones de las prestaciones a trabajadores.
Hugo Italo Morales, doctor en derecho laboral y presidente de la Comisión Laboral de Concamin, dijo que al eliminar la deducción de impuestos en prestaciones, las empresas ya no contratarán personal y optarán por otros esquemas de tercerización, precarizando aún más las condiciones laborales de los trabajadores mexicanos.
El abogado fiscalista Arturo Pueblita, dijo que “muchos patrones recurren al esquema de pago de prestaciones para tener un doble ahorro, es un ahorro en el pago al trabajador ya que no contempla ISR, y es un ahorro para el empresario porque lo deduce de su pago de impuestos, pero ahora no podrá hacerlo y se verá afectado”.
Fuente: El Universal
Fuente: El Universal