sábado, 4 de febrero de 2012

No más chapulines en el Congreso / En un plano ideal, los cargos debieran ser honorarios / Vicios del sistema político mexicano

Enrique Galván Ochoa | Dinero
Un número importante de senadores y diputados se separan de sus cargos, cuando todavía falta terminar su último periodo de sesiones, para ir en busca de nuevas posiciones, lo que les permitirá seguir viviendo del presupuesto. Es el juego de los chapulines. ¿Cual sería la mejor manera de enfrentar este problema? Permitir la relección con un periodo más como límite, fue la respuesta de 7 por ciento de nuestros encuestados esta semana.
Legislar para que después de cumplir un periodo en el Congreso no puedan ocupar otro cargo al menos seis años, piensa 38 por ciento. Convertir los cargos en honorarios para que pierdan el atractivo del dinero. La gran mayoría votó por última esta opción, con 46 por ciento. Y con ideas diversas participó 9 por ciento.

Foto

Metodología
Enviamos un cuestionario a 3 mil personas cuyos buzones electrónicos tomamos al azar entre los miembros de El Foro México. Contestaron 2 mil 184. Enseguida reproducimos fragmentos de algunas opiniones que expresaron.

Opiniones

Para los chapulines yo propongo la pena de muerte política, es decir, la expulsión de por vida de los poderes Legislativo, Ejecutivo y del federal. Para los legisladores de excelencia yo propongo la Gracia de Vida Eterna Política, siempre y cuando acepten un sueldo digno: no más de 20 salarios mínimos.


Ángel Ortiz Tovar/Chihuahua

Creo que sería bueno permitir la relección, siempre y cuando hubiera un efectivo proceso de evaluación del trabajo efectuado y rendimiento de cuentas. Sin embargo, en las condiciones actuales de enorme corrupción y falta de transparencia, es mejor que los diputados y senadores se vayan a descansar después de cumplir su periodo. No debe permitirse que se perpetuen la corrupción y las mafias.


Juan Carlos Díaz/Georgia,USA

Respondí que debieran ser cargos honorarios. Sé que es idealista, pero recordemos que hay que soñar con lo imposible para que la realidad cambie, y esto último urge.


Marisa Fernández Pérez/Xalapa

Deberían ser obligados a permanecer hasta el término de sus mandatos y esperar, por lo menos, seis años para pretender elegirse en otro cargo similar... es una pena que tengamos que mantener a una clase política que busca vivir del presupuesto, sin resultados plausibles... pero como ellos mismos legislan a su favor, lo veo muy difícil.


Miguel Ángel Torres Vera/Pachuca

Lo que se debe hacer es que cuando sean elegidos supuestamente por el voto popular, terminen su periodo y ya no vuelvan a ser candidatos ni para senadores ni diputados. Y que se les bajen los salarios de vergüenza, en un país de más de 60 millones de pobres. Pensándolo bien, ¿por qué mejor que no haya ni diputados ni senadores? No se notaría el vacío… no sirven para nada.

Óscar Pacheco Rodríguez/Distrito Federal

Yo creo que deben ser cargos honorarios, sin sueldo, que solamente les sirva la experiencia en actividades políticas, para luego contender para ocupar otros puestos de mayor jerarquía. De por sí tienen muchas prebendas, y a pesar de que ganan muy bien, faltan mucho a las sesiones, no toman en cuenta a quienes los eligieron y, sobre todo, dan muy mal ejemplo a la niñez y a la juventud de México, ya que muchos de nuestros jóvenes aspiran a ser narcos, diputados o senadores; parece que no hay diferencia entre estas actividades. Es vergonzoso.


Aída Carrillo Ocampo/Distrito Federal

Me parece que los servidores públicos electos deben terminar sus periodos a fuerza y no poder acceder a otro puesto hasta después de seis años para evitar la corrupción, clientelismo e impunidad.


Elena Salcedo Monroy/Distrito Federal

Como hombre mayor que soy y hojeando una revista de 1955 (no digo cuál) encontré el comentario de que si Miguel Alemán Valdés quisiera postularse nuevamente, Vicente Lombardo Toledano lanzaría como candidato al general Lázaro Cárdenas del Río. Es una necedad y una vergüenza que cada sexenio insistan en tratar de relegirse los presidentes, como aconteció con Salinas; no les basta brincar de diputados y senadores, y así hasta el infinito. ¿No conocerán la historia de la Revolución Mexicana? ¿Un millón de muertos de todos lados no fueron suficientes para hacernos entender que eso es aberrante? Con sus asegunes, Madero y todos los demás se han de estar revolcando en sus tumbas.


Manuel Orlando Licea y Figueroa/Tuxtla Gutiérrez

Brincando de hueso en hueso, puntuales a la hora de autoaprobarse aumentos y bonos, deberían sólo trabajar por amor al arte; de todas formas todos son adinerados, sólo entran a la política con el fin de hinchar más sus bolsillos, protegerse detrás de la impunidad que les da el fuero. Son una vergüenza para el país, especialmente cuando autorizan aumentos a la gasolina o prebendas a sí mismos...


Víctor Manuel Ortiz Villarreal/Tuxtla Gutiérrez

El sistema de elección, como está ahora, sirve para chupar sangre de quienes pagamos impuestos.


Guadalupe Pineda Rocha/Distrito Federal