Con altibajos en la asistencia, aprueban siete dictámenesLos legisladores se autorizaron un puente de cinco días, ya que la próxima reunión de pleno será el miércoles 23
Por tercera ocasión en el actual periodo, la Cámara de Diputados levantó su sesión ordinaria por falta de quórum; además, los legisladores se autorizaron un puente de cinco días, ya que la próxima reunión de pleno será el miércoles 23.
La sesión ordinaria de ayer se inició con 252 de los 500 diputados, uno más del mínimo requerido para decretar quórum.
En esa tónica de ausentismo, y después de aprobar siete dictámenes –en los que la participación más alta fue de 289 legisladores–, a las 14:19 horas sólo 236 votaron una reforma en materia de género a la Ley General de Salud.
A pesar de la falta de quórum, el presidente de la mesa directiva, Emilio Chuayffet, decretó un receso de 15 minutos para dar oportunidad a que más diputados llegaran al salón, pero ocurrió lo contrario.
Así, cuando se repitió la votación, 46 diputados ya se habían ido, y sólo quedaban 187, por lo cual Chuayffet decretó el término de la sesión y convocó para el próximo miércoles, debido a un acuerdo de los grupos parlamentarios de no citar el martes 22, con el argumento del día feriado por el 101 aniversario de la Revolución.
Durante las cuatro horas que la sesión se mantuvo a pesar de los altibajos en la asistencia, la Cámara de Diputados avaló una modificación a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, para incluir que, después de conocerse una agresión perpetrada por el esposo o cónyuge, la autoridad decrete que éste desocupe de inmediato el domicilio y de inmediato prohíba al probable responsable acercarse al mismo.
También se aprobó una reforma a la Ley de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para facilitar a los menores de edad la presentación de quejas por violación a sus garantías. Las denuncias podrán presentarse vía correo electrónico o por teléfono.
Se modificó la Ley General de Salud para que los denominados productos milagro sean decomisados por la Secretaría de Salud cuando la publicidad engañe al público. No obstante, la reforma se refiere a la incautación de los que ya estén en venta y la propia dependencia haya autorizado comercializar.
