Mal manejo en el desfogue, causa desborde de ríos, acusa Samberino Villegas Arias
2011-07-18 | Milenio | Villahermosa • Jorge Núñez
El líder del Frente de Desarrollo Progresista de Tabasco, Samberino Villegas Arias, aseguró que en caso de presentarse una nueva inundación, los únicos responsables serán la Conagua y la CFE.
Dijo que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha incurrido en toda una serie de errores, muchas de las cuales han tenido que ver con fallas en las obras de protección, mientras que la CFE continúa operando con una mala política en cuanto al manejo de las presas del Alto Grijalva.
Dijo que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ha incurrido en toda una serie de errores, muchas de las cuales han tenido que ver con fallas en las obras de protección, mientras que la CFE continúa operando con una mala política en cuanto al manejo de las presas del Alto Grijalva.
Afirmó que las inundaciones que enfrentan las partes bajas de Tabasco desde hace una semana semanas, obedecen a un mal manejo en el desfogue y no a la cantidad de lluvia que se pronosticó caería en el sureste del país.
“Sólo así podemos explicarnos que luego de algunos días de lluvias, algunos ríos se hayan desbordado en algunas zonas bajas, y que incrementen sus niveles entre viernes y sábado”, acusó.
Samberino Villegas negó que las lluvias registradas en los últimos días hayan sido las responsables de las inundaciones que registran algunas comunidades.
“Las lluvias que se han registrado en la región limítrofe entre Tabasco y Chiapas, ni con mucho nos provocarían jamás las inundaciones que hoy viven algunos poblados”, señaló.
Expuso que después de las lluvias de 151 milímetros en la región de la Sierra y el norte de Chiapas, por el paso de la onda tropical número 6 que provocó el desbordamiento de los ríos la Sierra y Pichucalco, comenzó la pérdida de pastizales y de cultivos en el campo tabasqueño.
El agua que empezó a pasar desde la semana pasada por el canal de alivio “El Censo”, hizo que el bordo que construyó la Conagua hace 15 días sobre el arroyo “Juan Gil” para salvaguardar la integridad de las 50 familias que viven en una parte de Ribera de las Raíces fuera arrasado por la corriente del riachuelo.
Los campesinos empezaron a usar sus cayucos para poder salir de sus viviendas, ya que el nivel del agua se incrementa a cada momento. Los tapetes de concreto y los troncos de árboles es lo que sobresale en el canal de alivio.
“No nos queda ninguna duda de que hoy, como ya lo ha venido haciendo desde el 2007, el gobernador Granier es el principal interesado, ocupado y preocupado porque la Conagua cumpla en tiempo y forma con las obras hídricas y los tabasqueños ya no suframos otra inundación.
“Pero parece que la Conagua no ha tomado nota de esta preocupación del pueblo tabasqueño, por lo que estamos de nueva cuenta en la zozobra de otro desastre natural”, culminó.