El 20 de abril de 2006 los mineros vivimos una jornada histórica en Las Truchas, Lázaro Cárdenas, Michoacán, por la huelga de 3 mil 500 trabajadores exigiendo que se reconociera a nuestro líder Napoleón Gómez Urrutia, a quien de modo arbitrario e ilegal el gobierno de Fox le retiró la toma de nota para darla a Elías Morales, El Sope, en un acto de descarado uso político.
Ese día tropas del Ejército y la Marina intentaron romper la huelga, hechos televisados y transmitidos por radio.
La sorpresa popular fue que los mineros rechazaron con balines de acero a los militares y triunfó la justa causa de los trabajadores, motivo por el cual se reconoció legalmente al auténtico líder de los mineros del país y se le entregó la toma de nota.
Los sindicalistas no olvidamos nuestras luchas y derrotas, menos nuestros triunfos, que son de todo el pueblo. Hoy cumplimos cinco años de aquella gesta histórica.
La sorpresa popular fue que los mineros rechazaron con balines de acero a los militares y triunfó la justa causa de los trabajadores, motivo por el cual se reconoció legalmente al auténtico líder de los mineros del país y se le entregó la toma de nota.
Los sindicalistas no olvidamos nuestras luchas y derrotas, menos nuestros triunfos, que son de todo el pueblo. Hoy cumplimos cinco años de aquella gesta histórica.
Los mineros, siderúrgicos y metalúrgicos del país por mayoría relegimos en 2008 a Napoleón Gómez Urrutia, porque con él hemos avanzado en la libertad y democracia sindical, en la mejora de nuestros contratos colectivos y en la unidad interna y solidaridad nacional e internacional. Sin embargo, de nuevo el gobierno federal nos negó la libertad para elegir a nuestro líder, negándonos de nuevo la toma de nota. Caso de gran relevancia que la Suprema Corte lo atrajera y resolviera. Pero otra vez ha sido detenida y alargada la solución por más de un año en esa instancia.