martes, 24 de abril de 2012

Las mafias de los sindicatos blancos, cómplices de la firma

Los empleados son obligados a firmar contratos de protección
Patricia Muñoz Ríos | Periódico La Jornada - Politica | Martes 24 de abril de 2012, p. 5
La empresa Wal-Mart se rige en México bajo contratos colectivos de protección de tres sindicatos blancos que no celebran asambleas ni rinden cuentas, y los trabajadores no conocen siquiera a los dirigentes. Estas organizaciones han pulverizado la sindicalización, ya que han firmado 88 contratos –uno por cada tienda– y 60 más con los trabajadores de sus respectivas panaderías, a fin de aislar cualquier posibilidad de que la base laboral ejerza sus derechos de manera conjunta.
Este esquema sindical permite a la empresa que la mayor parte de sus más de 8 mil trabajadores perciba un promedio de uno a dos salarios mínimos –la única revisión de contratos son los aumentos anuales conforme el porcentaje oficial–, así como imponer un reglamento interno de trabajo en que se prevén, por ejemplo, jornadas laborales flexibles en las que los empleados quedan a disposición de la empresa las 24 horas.

El informe de la Organización Regional Interamericana de Trabajadores (ORIT) titulado Contratación colectiva de protección en México señala lo anterior, en un análisis de las prácticas laborales de Wal-Mart en nuestro país, elaborado por el abogado y catedrático Alfonso Bouzas y el abogado también e investigador Luis Oliver Reyes Ramos.

El documento da cuenta de que el corporativo tiene 43 contratos colectivos de almacén y dos de oficinas administrativas del consorcio, firmados con el cetemista Sindicato Nacional de Empleados y Trabajadores de Supermercados, Centros Comerciales, organización que es casi exclusiva de Wal-Mart y es liderada por Francisco Flores Monterrosas.

La Asociación Sindical de Trabajadores, Empleados y Agentes de Casas Comerciales, de la familia Warneros, es titular de 45 contratos de almacenes del consorcio.

Mientras, el Sindicato Único de Trabajadores de la Industria del Pan es titular de 60 contratos colectivos de panaderías de esta tienda, firmados con una familia de representantes sindicales de apellidos Lazcano Montoya. A lo largo de más de 50 años, ese gremio ha monopolizado los contratos de los trabajadores de las panaderías del país, y sus integrantes se reciclan en los puestos sindicales para poder tener presencia convergente en sus sindicatos, según detalla el informe.

El documento indica que, con independencia del sindicato que sea titular del contrato, se firma un machote único o tipo..., lo que evidencia que la empresa define los términos de la contratación colectiva y sólo hay simulación sindical.

El reglamento define, por ejemplo, que la hora de entrada y salida a labores se establecerá de manera casuística; hay polivalencia de trabajadores para cambiarles la asignación de labores de manera discrecional; hay una cláusula de exclusión para que los trabajadores pueden ser despedidos a simple solicitud del sindicato, y así garantizar que no haya disidencia, y las cuotas sindicales son cubiertas por la empresa, la cual paga al sindicato cierto porcentaje en función del número de trabajadores y éstos no pagan nada, para que no tengan cuentas que pedir.