El 30 de julio asistí al Foro de Solidaridad con las huelgas mineras de cuatro años en Cananea, Taxco y Sombrerete. Estuve en Cananea, en una asamblea colmada de mineros y de solidaridad, sobre la cual los medios no informan.
Contra los mineros de Cananea hubo dos juicios plagados de violaciones a los derechos del trabajo: la huelga fue declarada inexistente cuatro veces y, al no poder avanzar, el patrón inventó un recurso de causa de fuerza mayor (en la mina no se puede trabajar) para terminar las relaciones de trabajo individuales y colectivas. La prueba la otorgó la Secretaría de Economía y el fallo favorable la junta federal, con un juicio de un día, el 14 de abril de 2008. Después, se sumaron más autoridades judiciales superiores a las violaciones.
La prueba real está a la vista: la mina reabrió con otros trabajadores, lo que demuestra que la prueba del gobierno y el juicio laboral fueron falsos e ilegales, para apoyar al patrón.
¿Tienen derechos humanos, laborales, sindicales y constitucionales, incluso universales los mineros? ¿O están excluidos y deben ser tratados como lo hacen los Larrea? ¿Quién vela por el estado de derecho? ¡Que sean los ciudadanos los titulares del derecho!
Escuchamos la solidaridad de las mujeres del gran pueblo de Cananea, a los yaquis de los siete gobiernos, a maestros, sindicalistas, a un cura de Los Ángeles, a los mineros de México, Canadá y Estados Unidos y a muchos más.
El señor Larrea, con el apoyo del gobierno, pretende enterrar el derecho de huelga en México, creando precedentes legales.
José Luis Contreras, por la Asociación Latinoamericana de Abogados Laboralistas y la Asociación Nacional de Abogados Democráticos
