Rosalía Vergara.
MÉXICO, DF.- Al presentar su nuevo Proyecto de Nación, Andrés Manuel López Obrador aseguró que su movimiento participará en las elecciones del 2012 y ofreció que de llegar a la presidencia regresará a los militares a los cuarteles y acabará con cacicazgos sindicales como el de Elba Esther Gordillo.
En un auditorio Nacional casi lleno, el excandidato presidencial detalló las 50 acciones de su plan de gobierno encaminadas a "derrotar a la oligarquía en el terreno político y por la vía pacífica”.MÉXICO, DF., 20 de marzo (apro).- Al presentar su nuevo Proyecto de Nación, Andrés Manuel López Obrador aseguró que su movimiento participará en las elecciones del 2012 y ofreció que de llegar a la presidencia regresará a los militares a los cuarteles y acabará con cacicazgos sindicales como el de Elba Esther Gordillo.
En un auditorio Nacional casi lleno, el excandidato presidencial detalló las 50 acciones de su plan de gobierno encaminadas a "derrotar a la oligarquía en el terreno político y por la vía pacífica”.
Acompañado de 37 especialistas e intelecutales que le ayudaron a conformar su Proyecto de Nación, entre ellos, Elena Poniatowska, Lorenzo Meyer, Arnaldo Córdova, Alejandro Encinas, Enrique González Pedrero, Ignacio Marván y Julio Scherer Ibarra, el exlíder perredista se volcó contra los 11 ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que dijo, han sido nombrados desde la presidencia de la república, por lo que promoverá una reforma para elegirlos democráticamente y de esa manera, el máximo tribunal del país “se ponga realmente al servicio del pueblo”.
El ex jefe de gobierno capitalino dijo también que promoverá la revocación de mandato. “Al cumplirse tres años, se hará una consulta para que la gente decida si continúa o no en su cargo. El pueblo es soberano: así como otorga un mandato, puede retirarlo. El pueblo pone y el pueblo quita”, afirmó.
En su larga arenga, López Obrador se comprometió a respetar la libertad de expresión y el credo religioso; a cuidar el prestigio de las fuerzas armadas y retirar al Ejército y a la Marina del combate contra el narcotráfico; tampoco se usará a los militares para resolver conflictos sociales “o para suplir la incapacidad del gobierno civil, mucho menos para reprimir al pueblo”.
López Obrador dijo que redifiniría la relación con Estados Unidos, basándose en el respeto a la soberanía y en la cooperación para el desarrollo, “pero sin muros que dividan o confronten” como el levantado en la frontera entre ambos países para evitar el paso de migrantes indocumentados.
Resaltó que se democratizarán los medios de comunicación para que cualquiera tenga una concesión de radio y televisión y “si Carlos Slim, como cualquier otro ciudadano, quiere tener un canal de televisión, no tendrá problemas, porque queremos que no sólo haya dos televisoras que acaparen toda la audiencia sino 10, 20, las que sean técnicamente posibles. De la misma forma, si Emilio Azcárraga, Ricardo Salinas Pliego o cualquier otro empresario desea participar en la telefonía, podrá hacerlo, porque no debe haber, bajo ninguna consideración, monopolios”, expresó.
También prometió plena libertad sindical ni respaldará como gobierno a dirigentes vitalicios, antidemocráticos ni corrputos. “Para que se entienda bien, no habrán cacicazgos como el de Elba Esther Gordillo que domina a los trabajadores del magisterio sin vivir siquiera en el país, sino en una zona residencial de gran lujo en el extranjero”.
Se comprometió a hacer justicia para trabajadores mineros, electricistas, sobrecargos, pilotos y empleados de Mexicana de Aviación que han sido injustamente despedidos por la política privatizadora y por el contubernio entre funcionarios y empresarios corruptos.
“Limpiaremos al gobierno de corrupción que será considerada como delito grave y se castigará sin derecho a fianza”, indicó.
Señaló que se cobrarán los impuestos pero de manera justa; las empresas mineras pagarán impuestos de extracción; prometió que al pueblo le costará menos mantener al gobierno; se cancelarán bonos, viáticos, pensiones de expresidentes, servicios médicos privados, cajas de ahorro especiales, el uso de aviones, helicópteros y otras canonjías.
“Cambiaremos la actual política económica. No será letra muerta el artículo 28 constitucional que prohíbe la existencia de monopolios. Habrá una nueva política energética. Impulsaremos la industria petroquímica y la producción de gas para frenar la creciente dependencia del exterior”.
Bajará el precio de las gasolinas, el diesel, el gas y la energía eléctrica. Se fomentará la industria de la construcción; se pavimentarán 362 municipios que no tienen caminos de asfalto; se construirán dos puertos, en Salina Cruz y Coatzacoalcos, entre otras cosas.
Se comprometió a establecer el Estado de Bienestar; es decir, habrá pensión universal para todos los adultos mayores de 68 años del país y para las personas con discapacidad. Se combatirá el hambre garantizando el derecho del pueblo a la alimentación y se otorgará atención médica y medicamentos gratuitos a toda la población.
Reformar, además, al sistema educativo para que ningún jóven se quede sin la oportunidad de estudiar ni tampoco haya rechazados en las universidades públicas del país.
“De los 36 mil asesinados, por la guerra estúpida de Calderón, la mayoría eran jóvenes. Siempre hemos dicho que quien tiene para pagar una escuela privada lo puede hacer, está en su derecho, pero el gobierno está obligado a garantizar una educación pública, gratuita y de calidad en todos los niveles escolares. La educación no debe convertirse en un privilegio”.
En ese sentido sostuvo que resolvería la crisis de inseguridad y violencia, no con criterior policiacos, “como le hace el gobierno usurpador” sino con justicia.
Estableció que este Nuevo Proyecto de Nación nace de manera paralela a la construcción del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) que actualmente cuenta con 2 mil comités municipales integrados por 14 mil ciudadanos. También creamos un comité en cada una de las 65 mil secciones electorales del país; cuentan con 25 mil, en los que participan cerca de 100 mil ciudadanos. Se espera cumplir la meta a finales de este año para afiliar a 4 millones de protagonistas del cambio verdadero que, a su vez, deberán convencer a 5 personas por protagonista, para alcanzar la cifra de 20 millones de enlistados, suficientes para transformar el rumbo de este país, dijo.
Acompañado de 37 especialistas e intelecutales que le ayudaron a conformar su Proyecto de Nación, entre ellos, Elena Poniatowska, Lorenzo Meyer, Arnaldo Córdova, Alejandro Encinas, Enrique González Pedrero, Ignacio Marván y Julio Scherer Ibarra, el exlíder perredista se volcó contra los 11 ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que dijo, han sido nombrados desde la presidencia de la república, por lo que promoverá una reforma para elegirlos democráticamente y de esa manera, el máximo tribunal del país “se ponga realmente al servicio del pueblo”.
El ex jefe de gobierno capitalino dijo también que promoverá la revocación de mandato. “Al cumplirse tres años, se hará una consulta para que la gente decida si continúa o no en su cargo. El pueblo es soberano: así como otorga un mandato, puede retirarlo. El pueblo pone y el pueblo quita”, afirmó.
En su larga arenga, López Obrador se comprometió a respetar la libertad de expresión y el credo religioso; a cuidar el prestigio de las fuerzas armadas y retirar al Ejército y a la Marina del combate contra el narcotráfico; tampoco se usará a los militares para resolver conflictos sociales “o para suplir la incapacidad del gobierno civil, mucho menos para reprimir al pueblo”.
López Obrador dijo que redifiniría la relación con Estados Unidos, basándose en el respeto a la soberanía y en la cooperación para el desarrollo, “pero sin muros que dividan o confronten” como el levantado en la frontera entre ambos países para evitar el paso de migrantes indocumentados.
Resaltó que se democratizarán los medios de comunicación para que cualquiera tenga una concesión de radio y televisión y “si Carlos Slim, como cualquier otro ciudadano, quiere tener un canal de televisión, no tendrá problemas, porque queremos que no sólo haya dos televisoras que acaparen toda la audiencia sino 10, 20, las que sean técnicamente posibles. De la misma forma, si Emilio Azcárraga, Ricardo Salinas Pliego o cualquier otro empresario desea participar en la telefonía, podrá hacerlo, porque no debe haber, bajo ninguna consideración, monopolios”, expresó.
También prometió plena libertad sindical ni respaldará como gobierno a dirigentes vitalicios, antidemocráticos ni corrputos. “Para que se entienda bien, no habrán cacicazgos como el de Elba Esther Gordillo que domina a los trabajadores del magisterio sin vivir siquiera en el país, sino en una zona residencial de gran lujo en el extranjero”.
Se comprometió a hacer justicia para trabajadores mineros, electricistas, sobrecargos, pilotos y empleados de Mexicana de Aviación que han sido injustamente despedidos por la política privatizadora y por el contubernio entre funcionarios y empresarios corruptos.
“Limpiaremos al gobierno de corrupción que será considerada como delito grave y se castigará sin derecho a fianza”, indicó.
Señaló que se cobrarán los impuestos pero de manera justa; las empresas mineras pagarán impuestos de extracción; prometió que al pueblo le costará menos mantener al gobierno; se cancelarán bonos, viáticos, pensiones de expresidentes, servicios médicos privados, cajas de ahorro especiales, el uso de aviones, helicópteros y otras canonjías.
“Cambiaremos la actual política económica. No será letra muerta el artículo 28 constitucional que prohíbe la existencia de monopolios. Habrá una nueva política energética. Impulsaremos la industria petroquímica y la producción de gas para frenar la creciente dependencia del exterior”.
Bajará el precio de las gasolinas, el diesel, el gas y la energía eléctrica. Se fomentará la industria de la construcción; se pavimentarán 362 municipios que no tienen caminos de asfalto; se construirán dos puertos, en Salina Cruz y Coatzacoalcos, entre otras cosas.
Se comprometió a establecer el Estado de Bienestar; es decir, habrá pensión universal para todos los adultos mayores de 68 años del país y para las personas con discapacidad. Se combatirá el hambre garantizando el derecho del pueblo a la alimentación y se otorgará atención médica y medicamentos gratuitos a toda la población.
Reformar, además, al sistema educativo para que ningún jóven se quede sin la oportunidad de estudiar ni tampoco haya rechazados en las universidades públicas del país.
“De los 36 mil asesinados, por la guerra estúpida de Calderón, la mayoría eran jóvenes. Siempre hemos dicho que quien tiene para pagar una escuela privada lo puede hacer, está en su derecho, pero el gobierno está obligado a garantizar una educación pública, gratuita y de calidad en todos los niveles escolares. La educación no debe convertirse en un privilegio”.
En ese sentido sostuvo que resolvería la crisis de inseguridad y violencia, no con criterior policiacos, “como le hace el gobierno usurpador” sino con justicia.
Estableció que este Nuevo Proyecto de Nación nace de manera paralela a la construcción del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) que actualmente cuenta con 2 mil comités municipales integrados por 14 mil ciudadanos. También creamos un comité en cada una de las 65 mil secciones electorales del país; cuentan con 25 mil, en los que participan cerca de 100 mil ciudadanos. Se espera cumplir la meta a finales de este año para afiliar a 4 millones de protagonistas del cambio verdadero que, a su vez, deberán convencer a 5 personas por protagonista, para alcanzar la cifra de 20 millones de enlistados, suficientes para transformar el rumbo de este país, dijo.
MÉXICO, DF.- Al presentar su nuevo Proyecto de Nación, Andrés Manuel López Obrador aseguró que su movimiento participará en las elecciones del 2012 y ofreció que de llegar a la presidencia regresará a los militares a los cuarteles y acabará con cacicazgos sindicales como el de Elba Esther Gordillo.
En un auditorio Nacional casi lleno, el excandidato presidencial detalló las 50 acciones de su plan de gobierno encaminadas a "derrotar a la oligarquía en el terreno político y por la vía pacífica”.MÉXICO, DF., 20 de marzo (apro).- Al presentar su nuevo Proyecto de Nación, Andrés Manuel López Obrador aseguró que su movimiento participará en las elecciones del 2012 y ofreció que de llegar a la presidencia regresará a los militares a los cuarteles y acabará con cacicazgos sindicales como el de Elba Esther Gordillo.
En un auditorio Nacional casi lleno, el excandidato presidencial detalló las 50 acciones de su plan de gobierno encaminadas a "derrotar a la oligarquía en el terreno político y por la vía pacífica”.
Acompañado de 37 especialistas e intelecutales que le ayudaron a conformar su Proyecto de Nación, entre ellos, Elena Poniatowska, Lorenzo Meyer, Arnaldo Córdova, Alejandro Encinas, Enrique González Pedrero, Ignacio Marván y Julio Scherer Ibarra, el exlíder perredista se volcó contra los 11 ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que dijo, han sido nombrados desde la presidencia de la república, por lo que promoverá una reforma para elegirlos democráticamente y de esa manera, el máximo tribunal del país “se ponga realmente al servicio del pueblo”.
El ex jefe de gobierno capitalino dijo también que promoverá la revocación de mandato. “Al cumplirse tres años, se hará una consulta para que la gente decida si continúa o no en su cargo. El pueblo es soberano: así como otorga un mandato, puede retirarlo. El pueblo pone y el pueblo quita”, afirmó.
En su larga arenga, López Obrador se comprometió a respetar la libertad de expresión y el credo religioso; a cuidar el prestigio de las fuerzas armadas y retirar al Ejército y a la Marina del combate contra el narcotráfico; tampoco se usará a los militares para resolver conflictos sociales “o para suplir la incapacidad del gobierno civil, mucho menos para reprimir al pueblo”.
López Obrador dijo que redifiniría la relación con Estados Unidos, basándose en el respeto a la soberanía y en la cooperación para el desarrollo, “pero sin muros que dividan o confronten” como el levantado en la frontera entre ambos países para evitar el paso de migrantes indocumentados.
Resaltó que se democratizarán los medios de comunicación para que cualquiera tenga una concesión de radio y televisión y “si Carlos Slim, como cualquier otro ciudadano, quiere tener un canal de televisión, no tendrá problemas, porque queremos que no sólo haya dos televisoras que acaparen toda la audiencia sino 10, 20, las que sean técnicamente posibles. De la misma forma, si Emilio Azcárraga, Ricardo Salinas Pliego o cualquier otro empresario desea participar en la telefonía, podrá hacerlo, porque no debe haber, bajo ninguna consideración, monopolios”, expresó.
También prometió plena libertad sindical ni respaldará como gobierno a dirigentes vitalicios, antidemocráticos ni corrputos. “Para que se entienda bien, no habrán cacicazgos como el de Elba Esther Gordillo que domina a los trabajadores del magisterio sin vivir siquiera en el país, sino en una zona residencial de gran lujo en el extranjero”.
Se comprometió a hacer justicia para trabajadores mineros, electricistas, sobrecargos, pilotos y empleados de Mexicana de Aviación que han sido injustamente despedidos por la política privatizadora y por el contubernio entre funcionarios y empresarios corruptos.
“Limpiaremos al gobierno de corrupción que será considerada como delito grave y se castigará sin derecho a fianza”, indicó.
Señaló que se cobrarán los impuestos pero de manera justa; las empresas mineras pagarán impuestos de extracción; prometió que al pueblo le costará menos mantener al gobierno; se cancelarán bonos, viáticos, pensiones de expresidentes, servicios médicos privados, cajas de ahorro especiales, el uso de aviones, helicópteros y otras canonjías.
“Cambiaremos la actual política económica. No será letra muerta el artículo 28 constitucional que prohíbe la existencia de monopolios. Habrá una nueva política energética. Impulsaremos la industria petroquímica y la producción de gas para frenar la creciente dependencia del exterior”.
Bajará el precio de las gasolinas, el diesel, el gas y la energía eléctrica. Se fomentará la industria de la construcción; se pavimentarán 362 municipios que no tienen caminos de asfalto; se construirán dos puertos, en Salina Cruz y Coatzacoalcos, entre otras cosas.
Se comprometió a establecer el Estado de Bienestar; es decir, habrá pensión universal para todos los adultos mayores de 68 años del país y para las personas con discapacidad. Se combatirá el hambre garantizando el derecho del pueblo a la alimentación y se otorgará atención médica y medicamentos gratuitos a toda la población.
Reformar, además, al sistema educativo para que ningún jóven se quede sin la oportunidad de estudiar ni tampoco haya rechazados en las universidades públicas del país.
“De los 36 mil asesinados, por la guerra estúpida de Calderón, la mayoría eran jóvenes. Siempre hemos dicho que quien tiene para pagar una escuela privada lo puede hacer, está en su derecho, pero el gobierno está obligado a garantizar una educación pública, gratuita y de calidad en todos los niveles escolares. La educación no debe convertirse en un privilegio”.
En ese sentido sostuvo que resolvería la crisis de inseguridad y violencia, no con criterior policiacos, “como le hace el gobierno usurpador” sino con justicia.
Estableció que este Nuevo Proyecto de Nación nace de manera paralela a la construcción del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) que actualmente cuenta con 2 mil comités municipales integrados por 14 mil ciudadanos. También creamos un comité en cada una de las 65 mil secciones electorales del país; cuentan con 25 mil, en los que participan cerca de 100 mil ciudadanos. Se espera cumplir la meta a finales de este año para afiliar a 4 millones de protagonistas del cambio verdadero que, a su vez, deberán convencer a 5 personas por protagonista, para alcanzar la cifra de 20 millones de enlistados, suficientes para transformar el rumbo de este país, dijo.
Acompañado de 37 especialistas e intelecutales que le ayudaron a conformar su Proyecto de Nación, entre ellos, Elena Poniatowska, Lorenzo Meyer, Arnaldo Córdova, Alejandro Encinas, Enrique González Pedrero, Ignacio Marván y Julio Scherer Ibarra, el exlíder perredista se volcó contra los 11 ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que dijo, han sido nombrados desde la presidencia de la república, por lo que promoverá una reforma para elegirlos democráticamente y de esa manera, el máximo tribunal del país “se ponga realmente al servicio del pueblo”.
El ex jefe de gobierno capitalino dijo también que promoverá la revocación de mandato. “Al cumplirse tres años, se hará una consulta para que la gente decida si continúa o no en su cargo. El pueblo es soberano: así como otorga un mandato, puede retirarlo. El pueblo pone y el pueblo quita”, afirmó.
En su larga arenga, López Obrador se comprometió a respetar la libertad de expresión y el credo religioso; a cuidar el prestigio de las fuerzas armadas y retirar al Ejército y a la Marina del combate contra el narcotráfico; tampoco se usará a los militares para resolver conflictos sociales “o para suplir la incapacidad del gobierno civil, mucho menos para reprimir al pueblo”.
López Obrador dijo que redifiniría la relación con Estados Unidos, basándose en el respeto a la soberanía y en la cooperación para el desarrollo, “pero sin muros que dividan o confronten” como el levantado en la frontera entre ambos países para evitar el paso de migrantes indocumentados.
Resaltó que se democratizarán los medios de comunicación para que cualquiera tenga una concesión de radio y televisión y “si Carlos Slim, como cualquier otro ciudadano, quiere tener un canal de televisión, no tendrá problemas, porque queremos que no sólo haya dos televisoras que acaparen toda la audiencia sino 10, 20, las que sean técnicamente posibles. De la misma forma, si Emilio Azcárraga, Ricardo Salinas Pliego o cualquier otro empresario desea participar en la telefonía, podrá hacerlo, porque no debe haber, bajo ninguna consideración, monopolios”, expresó.
También prometió plena libertad sindical ni respaldará como gobierno a dirigentes vitalicios, antidemocráticos ni corrputos. “Para que se entienda bien, no habrán cacicazgos como el de Elba Esther Gordillo que domina a los trabajadores del magisterio sin vivir siquiera en el país, sino en una zona residencial de gran lujo en el extranjero”.
Se comprometió a hacer justicia para trabajadores mineros, electricistas, sobrecargos, pilotos y empleados de Mexicana de Aviación que han sido injustamente despedidos por la política privatizadora y por el contubernio entre funcionarios y empresarios corruptos.
“Limpiaremos al gobierno de corrupción que será considerada como delito grave y se castigará sin derecho a fianza”, indicó.
Señaló que se cobrarán los impuestos pero de manera justa; las empresas mineras pagarán impuestos de extracción; prometió que al pueblo le costará menos mantener al gobierno; se cancelarán bonos, viáticos, pensiones de expresidentes, servicios médicos privados, cajas de ahorro especiales, el uso de aviones, helicópteros y otras canonjías.
“Cambiaremos la actual política económica. No será letra muerta el artículo 28 constitucional que prohíbe la existencia de monopolios. Habrá una nueva política energética. Impulsaremos la industria petroquímica y la producción de gas para frenar la creciente dependencia del exterior”.
Bajará el precio de las gasolinas, el diesel, el gas y la energía eléctrica. Se fomentará la industria de la construcción; se pavimentarán 362 municipios que no tienen caminos de asfalto; se construirán dos puertos, en Salina Cruz y Coatzacoalcos, entre otras cosas.
Se comprometió a establecer el Estado de Bienestar; es decir, habrá pensión universal para todos los adultos mayores de 68 años del país y para las personas con discapacidad. Se combatirá el hambre garantizando el derecho del pueblo a la alimentación y se otorgará atención médica y medicamentos gratuitos a toda la población.
Reformar, además, al sistema educativo para que ningún jóven se quede sin la oportunidad de estudiar ni tampoco haya rechazados en las universidades públicas del país.
“De los 36 mil asesinados, por la guerra estúpida de Calderón, la mayoría eran jóvenes. Siempre hemos dicho que quien tiene para pagar una escuela privada lo puede hacer, está en su derecho, pero el gobierno está obligado a garantizar una educación pública, gratuita y de calidad en todos los niveles escolares. La educación no debe convertirse en un privilegio”.
En ese sentido sostuvo que resolvería la crisis de inseguridad y violencia, no con criterior policiacos, “como le hace el gobierno usurpador” sino con justicia.
Estableció que este Nuevo Proyecto de Nación nace de manera paralela a la construcción del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) que actualmente cuenta con 2 mil comités municipales integrados por 14 mil ciudadanos. También creamos un comité en cada una de las 65 mil secciones electorales del país; cuentan con 25 mil, en los que participan cerca de 100 mil ciudadanos. Se espera cumplir la meta a finales de este año para afiliar a 4 millones de protagonistas del cambio verdadero que, a su vez, deberán convencer a 5 personas por protagonista, para alcanzar la cifra de 20 millones de enlistados, suficientes para transformar el rumbo de este país, dijo.