Organizaciones rechazan proceso electoral del 7 de junio y llaman al boicot pacifico
Es un intento ridículo y desesperado del sistema por recuperar una credibilidad perdida
“El estado pretende limitar el ejercicio de los más mínimos derechos políticos y civiles”
MORELOS. Las organizaciones del Pacto Morelos por la soberanía, calificaron como “un espectáculo patético” al periodo de campañas electorales en la entidad y que evidencian, la grave crisis que actualmente vive el país; por lo que advierten que promoverán entre sus agremiados el no avalar el proceso electoral. “Con toda claridad decimos: este 7 de junio no vamos a legitimar su proceso electoral. Nos negamos a participar en un proceso que, en este contexto, sólo brinda legitimidad al régimen político actual”, exponen en un análisis.
Ahí, las organizaciones integrantes del pacto, consideran como entendible, las acciones que, en sus distintas expresiones, el movimiento social está impulsando para hacer constar el rechazo a este proceso electoral próximo, ya sea retirar o marcar propaganda electoral o acciones pacíficas de boicot.
“Ello no significa que no defendemos de manera irreductible todas y cada una de las libertades políticas básicas: reunirse, protestar, organizarse políticamente, sobre todo cuando el Estado pretende limitar el ejercicio de los más mínimos derechos políticos y civiles.
Luchamos por la democracia pero no hay democracia cuando de una manera cada más graves se violan los derechos políticos y humanos en nuestro país. Votar por cualquier partido neoliberal y privatizador es avalar la existencia de una democracia apuntalada por masacres”, justifican.
Destacan que el movimiento social independiente “no debe hacer el juego a este intento ridículo y desesperado del sistema de recuperar una credibilidad perdida irremediablemente y que día con día, antes de las votaciones, se confirma con nuevos escándalos de corrupción, de saltos de candidatos entre partidos variados sin ninguna base política o programática, de campañas de lodo y ataques entre los contendientes pero donde generalmente todas las acusaciones son ciertas o de partidos como el Verde que sistemáticamente viola las reglas electorales, como nuevo ejemplo del mercantilismo y el predominio del dinero en la política institucional, pues simplemente paga por violar la ley”.
El análisis, pone en contexto la jornada de votaciones del próximo 7 de junio, entre los trágicos eventos de Ayotzinapa, la vorágine de violencia, la llamada guerra contra el narco -que no ha sido sino un proceso de militarización generalizada-, el incremento de la violencia y los feminicidios, la extensión de la miseria y el desempleo así como la cada vez más preocupante catástrofe ambiental y el pobre desarrollo de la economía, la devaluación galopante y la represión política creciente, como lo muestra el caso del ataque a las y los dignos trabajadores del campo en San Quintín, Baja California.
“Nuestro llamado de repudio al proceso electoral, más que una fórmula de votación o anulación, pasa más por levantar y fortalecer campañas, como la reciente Caravana por el agua, el territorio, el trabajo y la vida, o luchas que denuncian la caricatura de democracia por la que atravesamos e impulsen la organización popular y el establecimiento de puentes entre las muchas luchas y movimientos de todo tipo que, a pesar de todo, luchan y resisten”, concluye el documento.
