Condena el obispo ataques a activistas
Lilia Ovalle | Corresponsal | Periódico La Jornada | Lunes 13 de febrero de 2012, p. 18
Torreón, Coah., 12 de febrero. El terror implantado en la población, así como la intimidación a defensores de derechos humanos, forman parte de las estrategias aplicadas a la sociedad civil ante la militarización del país, precisó el obispo de Saltillo, Raúl Vera López.
Tras concluir la misa en la catedral ubicada en la capital de Coahuila, el sacerdote indicó que la incursión de militares y agentes federales en el centro de derechos humanos Juan Gerardi, en la ciudad de Torreón, forma parte de un esquema en el que se tiene por objetivo intimidar a las personas que participan en organizaciones civiles, quienes trabajan por la creación de un sujeto social.
El obispo, quien defiende las causas de organizaciones sociales, refirió que el control disputado por el Estado contra el narcotráfico alcanza “a otros enemigos”. En ese contexto “son adversarios quienes critican el esquema gubernamental de seguridad”.
De esta forma, explicó, la incursión de militares y agentes federales en la oficina Juan Gerardi en Torreón –donde se atienden casos de desapariciones forzadas de personas en Coahuila– es una réplica de lo ocurrido en Belén Casa del Migrante, en Saltillo, donde se ha amenazado a defensores de derechos humanos, o incluso en el cateo al penal en la misma ciudad, donde las fuerzas armadas allanaron la iglesia adonde acuden los presos.
“Con las intentonas que existen sobre una Ley de Seguridad Nacional, totalmente fascista, todo esto se va a valer; esto que están haciendo es ilegal, entonces el día que logren transformar la Constitución será precisamente con esa legislación para que esto sea permitido. El día de hoy podemos gritar y podemos protestar, el día de mañana ni eso, porque harán constitucional lo ilegal”, concluyó.