lunes, 20 de febrero de 2012

Mientras más crece la riqueza de Larrea, más crece la inmoralidad

Minera México no ha honrado su palabra, acusa Familia Pasta de Conchos
Víctor Ballinas | Periódico La Jornada | Lunes 20 de febrero de 2012, p. 3
En Polanco, donde se ubican las oficinas del Grupo Minera México, de nueva cuenta Familia Pasta de Conchos recordó la tragedia del 19 de febrero de 2006, en la que perecieron 65 mineros. Tras presentar una obra de teatro y una misa, la organización insistió en su demanda de rescatar ya los restos de 63 mineros que permanecen sepultados en la carbonera.
Familiares, viudas, huérfanos y trabajadores mineros exigieron a Minera México, del Grupo México, que recupere los restos de los trabajadores que después de 72 meses permanecen bajo los escombros.

María Trinidad Cantú, quien perdió a su hijo Raúl en la explosión de la mina, leyó el sexto memorial de los 65 caídos. Minera México no ha cumplido con nosotros. No ha honrado su palabra y, mientras más crece la riqueza de Germán Larrea, el principal accionista del grupo, más crece la inmoralidad.

Durante la misa, al leer el mensaje de Familia Pasta de Conchos, Cantú aseveró que Germán Larrea es “el empresario socialmente irresponsable, que según la revista Forbes tiene la segunda mayor fortuna personal de México, con unos 16 mil millones de dólares, después de Carlos Slim, y ocupa el séptimo lugar en la lista de los 100 empresarios más importantes de México”.

Precisó que Francisco Xavier García de Quevedo preside Minera México, firma que anunció 6 mil millones de dólares a invertir en los próximos cinco años, y Grupo México disputa el segundo lugar entre las mayores compañías del mercado bursátil mexicano, con una capitalización de 26 mil 600 millones de dólares. Mientras nuestras viudas, con tres hijos, sobreviven con una pensión de 3 mil 300 pesos mensuales.
Ejemplo de injusticia

Cantú sostuvo que “el rescate de los trabajadores no costaría ni uno por ciento de la utilidad neta de las ganancias anuales de Grupo México. Está de por medio la verdad. A la fecha no hay una investigación seria, no hay debido proceso. No hay responsables sentenciados y no hay una satisfactoria reparación del daño.

El caso constituye un ejemplo de lo que hoy es la injusticia en México. Además, el que se sepa la verdad significa la ruina política de Francisco Xavier Salazar Saénz, hoy diputado federal del PAN, y de Javier Lozano Alarcón, ambos ex secretarios del Trabajo y hoy candidatos a senadores por el Partido Acción Nacional. Sería el descrédito para las administraciones de Vicente Fox y Felipe Calderón. Por eso no se reabre el caso Pasta de Conchos y no se rescata lo que quedó de nuestros mineros.

Pasta de Conchos, aseveró, es un expediente abierto que no está resuelto, por lo que hacemos un llamado a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para que admita nuestro caso e inicie el litigio contra el Estado mexicano por la violación a los derechos humanos de los 65 mineros y sus familiares.

El religioso Carlos Rodríguez, investigador del Centro de Acción y Reflexión Laboral, ofició misa acompañado de cinco sacerdotes. Rodríguez apremió a las comisiones senatoriales de Comercio y Fomento Industrial y la de Estudios Legislativos para que de inmediato analicen y dictaminen la iniciativa sobre la creación de una comisión nacional reguladora de la industria del carbón, y llamó al Senado a ratificar los convenios 176 y 138 de la Organización Internacional del Trabajo, a fin de garantizar mejores condiciones de trabajo para los mineros y acabar con el trabajo infantil en las minas.