La Constitución justifica estas inversiones, dicen legisladores
Roberto Garduño y Enrique Méndez | Periódico La Jornada | Jueves 12 de enero de 2012, p. 29
Personal de Mexicana de Aviación planteó ayer que el gobierno de Felipe Calderón puede contribuir a la restructuración de la empresa si emite una carta de crédito por 300 millones de dólares, que se otorgaría en calidad de capital de trabajo.
En conferencia de prensa en la que estuvieron acompañados por diputados federales del PRD y PT, plantearon que la banca de desarrollo podría financiar la reanudación de operaciones de Mexicana, y con ello participar en la capitalización de los pasivos de la empresa, así como aceptar que se renegocien los términos de la deuda que la empresa tiene con el propio gobierno federal.
Durante la sesión de ayer en la Comisión Permanente, diputados y senadores de PRD y PT presentaron un punto de acuerdo para solicitar al gobierno de Calderón que acepte emitir dicha carta de crédito, pero el documento se turnó a comisiones debido a que el PAN y el PRI se negaron a considerarlo de urgente resolución.
El punto de acuerdo incluye una solicitud de comparecencia de los secretarios de Comunicaciones y del Trabajo, Dionisio Pérez Jácome y Rosalinda Vélez, respectivamente, para que expliquen la viabilidad de la medida y si pueden avalarla, de acuerdo con las atribuciones de cada dependencia.
Además, argumenta, el artículo 25 de la Constitución justifica que el gobierno realice este tipo de inversiones, no sólo para preservar las fuentes de empleo, sino en este caso específico recuperar, reactivar y reiniciar las actividades de la aerolínea.
Recuerda que el fin de las operaciones de Mexicana afectó en 2010 a 3.4 millones de pasajeros en rutas domésticas, equivalentes a 28.5 por ciento del total del mercado; 2.1 millones de pasajeros en rutas internacionales, que representan 64.3 por ciento del mercado.
Además dejaron de realizarse 74 mil operaciones domésticas, equivalentes a 30 por ciento; 23 mil internacionales, 60.5 por ciento, y las tarifas en rutas domésticas e internacionales aumentaron entre 60 y 280 por ciento.