Las reservas probadas alcanzarían 110 millones de barriles de petróleo crudo equivalente
Según el modelo de negocio de PEP habrá más producción y se asegura pago de impuestos
Israel Rodríguez
Domingo 17 de abril de 2011, p. 26
Como parte de la estrategia de Petróleos Mexicanos (Pemex) para acelerar la participación de empresas privadas en la explotación de hidrocarburos, Pemex Exploración y Producción (PEP) ha identificado siete áreas de campos maduros de la región norte propuestas para una segunda ronda de licitaciones.
Esta segunda ronda de licitaciones para la extracción de crudo a través de los contratos integrales de exploración y producción, que permitirá a las empresas nacionales y extranjeras realizar la extracción de crudo, podría darse a conocer en junio próximo, según revelan informes de la paraestatal.
Esta segunda ronda de licitaciones para la extracción de crudo a través de los contratos integrales de exploración y producción, que permitirá a las empresas nacionales y extranjeras realizar la extracción de crudo, podría darse a conocer en junio próximo, según revelan informes de la paraestatal.
Las áreas que formarán parte de esta segunda ronda de licitación son conocidas como Altamira, Ébano, Arenque, Pánuco, Tierra Blanca, Atún y San Andrés, incluyen 25 campos maduros en 6 mil 836 kilómetros cuadrados y representan un volumen original de 13.6 millones de barriles de aceite y 29 mil 896 millones de pies cúbicos de gas.
De acuerdo con los informes oficiales las reservas probadas de los 25 campos de estas siete áreas es de 110 millones de barriles de petróleo crudo equivalente y la reserva total asciende a 246 millones de barriles.
Además, PEP tiene planeado llevar una tercera ronda de licitaciones en campos maduros mediante la aplicación de los contratos integrales de explotación en 11 áreas potenciales de Chicontepec, antes de que concluya 2011.
La premura por insertar al sector privado nacional y extranjero en la explotación de crudo durante la actual administración, ha llevado a PEP a identificar otras 14 áreas en aguas profundas del Golfo de México.
De acuerdo con la paraestatal, PEP diseñó un modelo de negocios balanceado para las empresas petroleras, que se traduce en mayor producción para PEP y que asegura el pago de impuestos al gobierno.
La intención es que en el corto y mediano plazos la iniciativa privada participe en la extracción de uno de cada cinco barriles de crudo que se exploten en México. Esta cartera de proyectos contiene oportunidades para incrementar la capacidad de producción en 20 por ciento, según las proyecciones de PEP.
Por lo pronto, existen 21 empresas interesadas en participar en la primera ronda de licitaciones a través de los contratos integrales de exploración y producción en la región sur de la república mexicana para explotar hidrocarburos en los campos Magallanes, Santuario y Carrizos.