jueves, 17 de marzo de 2011

México pretende construir hasta 10 nuevos reactores nucleares, insiste Greenpeace

La crisis radiactiva que se vive en Japón es global, afirman investigadores de la UAM
El plan es a 17 años y es promovido por la Secretaría de Energía: Gustavo Ampugnani
Angélica Enciso y Laura Poy
Jueves 17 de marzo de 2011, p. 21
Mientras Alemania, Austria, China, Chile, Suiza y Venezuela han decidido revisar sus planes nucleares tras la crisis en Japón, funcionarios mexicanos insisten en construir entre dos y 10 nuevos reactores nucleares en los próximos 17 años, señaló Greenpeace. En México, se ha desatado una campaña pronuclear impulsada por la Secretaría de Energía, por conducto de la Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias (CNSNS).
Por su parte, investigadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) dijeron que los habitantes del planeta no debemos olvidar que la energía nuclear tiene un poderinsospechado de destrucción y que no existe ninguna alternativa ciento por ciento segura para su uso. Señalaron que la crisis nuclear japonesa es un problema “global, porque la contaminación no entiende de fronteras ni países
Greenpeace denunció que la CNSNS busca minimizar los riesgos inherentes de esta opción tecnológica para generar electricidad, restarle importancia a lo que está hoy enfrentando el pueblo japonés debido no sólo a los fenómenos naturales sino también a la liberación de radiactividad y exposición de la gente, para promover la operación de nuevos reactores nucleares en el país.
Gustavo Ampugnani, director de campañas de Greenpeace, sostuvo queMéxico cuenta con potencial suficiente para apostarle a opciones energéticas más seguras, con menor riesgo para el ambiente y la salud de las personas, como las fuentes renovables de energía.
Jorge Antonio Amézquita Landeros, especialista del departamento de Atención a la Salud de la UAM-Xochimilco, destacó que podemos enfrentar escenarios de afectación por radiación. Tras la crisis por el sobrecalentamiento de cuatro de los seis reactores nucleares de la planta de Fukushima y la emisión de gases radiactivos, indicó que enfrentamos un problema global, ya que no es sólo de los japoneses.
En entrevista por separado, Margarita Castillejos Salazar, experta en contaminación atmosférica y catedrática de la UAM-Xochimilco, afirmó que las emisiones radiactivas no son estáticas, por lo que sus efectos no se limitarán a la zona del desastre. El impacto de una crisis nuclear como la que vive Japón afectará a una enorme diversidad de ecosistemas y personas, de tierras de cultivo y generación de alimentos, que debemos considerar para intentar medir el impacto real.
Afirmó que la contaminación radiactiva puede permanecer durante cientos, e incluso miles de años en los ecosistemas afectados, pues a diferencia de otro tipo de agresión severa al entorno ambiental, en este caso es prácticamente imposible regenerar en corto tiempo suelos, agua y biodiversidad afectada. Es una tarea que puede llevar generaciones y no lograr jamás recuperar al ciento por ciento el entorno.