El cobro de energía eléctrica mantiene en serios apuros económicos a los recintos religiosos.
Encienden candiles sólo en actos especiales
Aguascalientes
21/02/2011
Tan sólo con respecto a la Catedral Basílica, el desembolso bimestral supera los 12 mil pesos.El Custodio, canónigo Miguel Medina Fernández, puntualizó que los gastos de mantenimiento de los templos son muy elevados, especialmente por los cobros de luz y agua, toda vez que la mayoría cuenta con muchos candiles para mantener iluminados los recintos, pero ante la carestía de la energía eléctrica, han optado por racionalizar su uso.
En el caso específico de la Catedral, el encendido de las luces únicamente se da en ciertos horarios y conforme sea necesario, a fin de generar ahorros.
En días de fiesta por lo regular aumenta el consumo de luz y de inmediato se ve reflejado en los recibos, por lo que también se han puesto en marcha estrategias de ahorro de energía, las cuales se han sugerido al resto de los templos y parroquias de la Diócesis.
Lo mismo ocurre con los cobros del agua, sin embargo este gasto es inferior en comparación al de la luz, destacó el presbítero.
En cuanto a los robos al interior del recinto, el custodio informó que por fortuna han disminuido, lo cual se debe también a una serie de acciones puestas en marcha para inhibir la presencia de delincuentes y no dar tentaciones.
De tal manera, el dinero que se reúne todos los días se retira a diario y se guarda en sitios seguros, sin embargo no se ha logrado erradicar los robos al 100 por ciento.
Por otro lado, mencionó que los gastos de mantenimiento de la Catedral son muy elevados, ya que tan sólo en sueldos de los sacerdotes, sacristanes, flores, cantores, lectores, barrenderos y personal general de limpieza, se gastan varios miles y miles de pesos al mes.
En consecuencia, se ha tomado la determinación de no gastar más allá de los recursos con que puede contar mensualmente la Catedral, y cuando los ingresos bajan, automáticamente se cancelan algunos servicios.
De escasear más los recursos, entonces se tendría que recurrir a la suspensión de la obra material que constantemente se realiza en el recinto y a no encender las luces, pues es preferible pagar los sueldos de los trabajadores a que la Catedral se encuentre muy iluminada, destacó el Padre Miguel Medina.
Posteriormente mencionó que aunque la situación económica es muy complicada e impacta también a la Iglesia Católica, el mantenimiento de la Catedral continuará aunque se realizará por etapas y conforme a la disponibilidad de los recursos económicos.
Reconoció que son muchas las obras de mantenimiento que se le han realizado al recinto, sin embargo falta mucho por hacer y muchísimos millones de pesos.
