Guadalupe Cruz Jaimes
A pesar de que en 2010 se registraron avances en normas y mecanismos para mejorar las condiciones laborales de las mexicanas, en los hechos, la mayoría de las 16.8 millones de trabajadoras labora sin el acceso a derechos mínimos, como la seguridad social y la organización sindical, aún las que se ocupan en el mercado formal. Rosario Ortiz Magallón, integrante de la Red de Mujeres Sindicalistas (RMS), señaló que las normas y mecanismos son insuficientes porque, además de que no son obligatorios, en el país no se respetan los derechos establecidos en la Ley Federal del Trabajo y en instrumentos internacionales en la materia.
Además, la norma mexicana para la igualdad laboral entre mujeres y hombres, de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, y el modelo de Equidad de Género, del Instituto Nacional de las Mujeres, al no ser vinculantes “queda a disposición de la patronal tomarla en cuenta o no”....
En este sentido, Arturo Alcalde Justiniani, abogado laboral, refirió en entrevista que al “crítico panorama” se suma la destrucción de empleos permanentes por parte del gobierno federal, ejemplo de ello son las y los miles de trabajadores desempleados tras la desaparición de Luz y Fuerza del Centro y la crisis financiera de Mexicana.
Con la extinción de la empresa pública se perdieron 44 mil empleos formales, este año cerca de 16 mil trabajadoras y trabajadores pelearon jurídicamente y mediante la movilización social para que el gobierno federal les devuelva sus empleos, mediante la modificación del artículo 4 de la Ley de Servicio Público de Energía Eléctrica, que permitiría la creación de una nueva empresa que atienda la zona centro.
Mientras la lucha del Sindicato Mexicano de Electricistas este año logró el reconocimiento jurídico de las autoridades y la consolidación de su militancia, sobrecargos, pilotos y personal de tierra de Mexicana de Aviación también salió a las calles y pugnó con autoridades e inversionistas para salvar esta empresa, fuente de trabajo de cerca de 8 mil personas.
Sin embargo, “el embate fue muy duro, miles de familias salieron seriamente perjudicadas”, ya que la empresa regresó a volar con alrededor del 25 por ciento de su personal, las y los trabajadores de Mexicana confían en que la recuperación económica de la aerolínea les permita regresar a sus empleos, aunque “partirían de cero, con otro contrato, sin respetar su antigüedad”, ya que fueron liquidados en su totalidad.
Las y los electricistas en resistencia, junto con el personal de Mexicana recién liquidado, se sumaron este 2010 a las 2.7 millones de personas sin empleo, que reportó la ENOE el tercer trimestre del año.
En este escenario, se prevé que en febrero próximo se discuta una reforma laboral que fortalezca la contratación colectiva, el derecho de huelga y la autonomía sindical, partiendo de un enfoque de género, sin embargo, a decir de Rosario Ortiz, no existen “condiciones” del Legislativo para hacer una reforma integral, por lo que “los buenos deseos de equidad de género en el mundo del trabajo, una vez más se quedarán en el discurso”.
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