Qué alarmantes concepciones las expresadas en el informe del Cisen Programa de estudios estratégicos para 2010, sobre las ONG.
Colocar en el mismo plano a organizaciones sociales y de izquierda y a las del narco como riesgos para la estabilidad del país no es más que la confirmación de una visión totalitaria y fascista del régimen calderonista, que identifica las acciones de inconformidad colectiva como contrarias a un régimen democrático, que estigmatiza a las organizaciones de izquierda como peligrosas y que utiliza el criterio de
si no estás conmigo, estás contra mí. ¿Qué sigue? ¿La persecución y represión de las ONG estigmatizadas como de izquierda y de las protestas colectivas? Sí, lo anterior prefigura claramente el plan del gobierno de pasar de la criminalización de la lucha y la protesta social hacia una represión generalizada contra la inconformidad y rebeldía populares, cada vez más creciente y absolutamente legítimada por el deterioro de las condiciones de vida de millones de mexicanos.
Es insultante sostener que se preservan la democracia y la libertad, cuando en los hechos únicamente buscan acallar los reclamos hacia una política que sólo beneficia a una minoría y sume en la miseria a la inmensa mayoría de los mexicanos.
La democracia sí está en peligro, pero no somos las ONG las causantes, sino este régimen depredador y corrupto, ligado hipócritamente al narco y que pretende impedir al pueblo ejercer su soberanía.
Felipe Calderón se ha creído aquello de
El Estado soy yoy eso sí es muy peligroso.
Núcleo-ONPP: Antonio Orozco Michel y Florentino Moreno (Tlaquepaque)