
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Del total de los mexicanos, 92% considera a
la corrupción como un “problema mayor”, pero 60% opina que “no tenemos
remedio” y que “es muy difícil” acabar con ella, según datos de la
Encuesta Nacional de Corrupción y Cultura de la Legalidad, presentados
en el Senado de la República.
La doctora María Marván, expresidenta del IFAI y exconsejera del IFE, expuso algunos de los principales datos y hallazgos del estudio. Destacó que 75% de los encuestados afirmó que no conoce ninguna campaña anticorrupción y 49% considera que éstas “son inútiles”.
Los datos advierten que “si queremos entrarle en serio al tema de la corrupción, no se trata de hacer spots o jingles y decirle a la gente ‘mira, esto es corrupción’. Tenemos que tomar medidas muy tajantes”.
Coautora del estudio junto con otros especialistas, Marván Laborde
destacó que 5 de cada 10 mexicanos dice conocer las leyes, pero la
mayoría, inclusive los que dicen no conocerlas, opina que “las leyes
están mal hechas, no sirven para nada; por tanto no pueden obedecerlas”.
Esa situación refleja una débil cultura sobre la legalidad y en
contra de las violaciones a las leyes, por más mínimas que sean,
abundaron los especialistas.
Eduardo Bohorquez, presidente de la organización Transparencia
Mexicana, abundó sobre el estudio auspiciado por la UNAM, y relató el
largo y complicado camino para que se aprueben las siete leyes
anticorrupción pendientes en el Senado.
La encuesta demostró “que la corrupción no es sólo de dos. Se
necesita una red… Necesitamos formar otras redes que reformen y
transformen varias instituciones”, abundó Bohorquez.
La maestra Fidela Navarro Luna, quien también participó en el
estudio, afirmó que existen grandes “contradicciones” porque 9 de cada
10 mexicanos encuestados opina que existe corrupción, pero 7 de cada 10
negaron haber sufrido o padecido algún acto de corrupción en el último
año.
Otro de los hallazgos de la encuesta, de acuerdo con la especialista
del Instituto de Investigaciones Jurídicas, es que “la corrupción tiene
más víctimas que autores; la gente dice que si ha participado en actos
de corrupción es porque ha sido extorsionada, es decir, que hay más
extorsiones que sobornos”.
En su intervención, Alejandro Concha Cantú, director de la revista Reforma Judicial, señaló que existe un diagnóstico claro: la corrupción es un problema gravísimo.
Fuente: Proceso
Fuente: Proceso