domingo, 18 de octubre de 2015

Funcionarios destruyen a Pemex

Antonio Gersherson | Opinión-La Jornada
Los funcionarios nos muestran su capacidad para destruir a Pemex, por ejemplo en el gas natural. Tenemos capacidad de producirlo, pero ellos la frenan en lo que pueden, y cada vez más lo impulsan arrojándolo más a la atmósfera y quemándolo, pero, como veremos, Pemex puede defenderse en algunos lugares, y crecer a pesar de aquellos, demostrando que sí se puede crecer. Veamos al gas natural. Primero, lo menos defendible por los funcionarios son los crecientes quema y arrojo del gas natural a la atmósfera.

El primer año que veremos es el actual, de enero a agosto. El promedio es de 412 mmpcd (millones de pies cúbicos diarios).

El año pasado, 2014, fueron 242 mmpcd; en el presente la pérdida se fue casi al doble que el anterior.

En 2013 la quema y el arrojo del gas natural a la atmósfera fueron 123 mmpcd; también el año siguiente fue casi el doble.

Luego ponen de pretexto un accidente, pero el aumento es constante, y a nadie, más que a sí mismos, pueden echar la culpa, y a su avidez por las mordidas en las crecientes importaciones de gas.

El gas no asociado, el que no va con petróleo crudo, es el que han entregado mayoritariamente a trasnacionales, y su caída ha sido mayor. De 2 mil 458 mmpcd en 2010, a la producción de este año, promedio enero-agosto, mil 631 mmpcd, perdió una tercera parte, e insisten en entregar medios de producción a las trasnacionales.

Las cantidades que han entregado a Burgos, las mayores a empresas extranjeras, han sido: en 2011, 29 mil millones de pesos; en 2012, 26 mil millones; en 2013, 19 mil millones, y en 2014, 20 mil millones.

Su producción fue bajando, de mil 515 mmpcd en 2009 a mil 142 en lo que va de 2015, una reducción del 25 por ciento.

Nos quieren presentar esta caída como inevitable. Con ellos en el mando, tal vez lo sea, pero tenemos un ejemplo, del que ellos no quieren ni hablar: Litoral de Tabasco. Y vamos a hablar ahora sólo del gas natural, que es lo principal, aunque hay también una producción de petróleo crudo.

Su punto más bajo fue en 2003, con 87 mmpcd. Ha subido continuamente hasta los actuales 967 mmpcd, más de 11 veces la producción anterior.

El presupuesto que se le adjudicó fue de 4 mil millones de pesos en 2011; 4 mil millones en 2012; 37 mil millones en 2013, y 46 mil millones en 2014. ¿Porqué estos dos últimos aumentos?

Una parte de la respuesta está en el Reporte de los resultados de Pemex al 31 de diciembre de 2014, en la parte Proyectos de exploración:

Plataforma de compresión en Tsimin-Xux, la parte más importante del Litoral de Tabasco.

El 25 de noviembre de 2014 se culminó la instalación de la plataforma de compresión CA-Litoral-A en el proyecto de desarrollo Tsimin-Xux.

La plataforma de compresión CA-Litoral-A tiene capacidad de separación de 200 mil barriles diarios de crudo y de 600 millones de barriles diarios de gas.

O sea que aumentó la inversión porque desde la fecha mencionada (noviembre de 2014) no se lleva a cabo sólo un proceso de extracción de crudo y gas, sino también un primer paso de su transformación industrial.

Claro, esto no lo dicen los discursos oficiales. Marcha en el sentido contrario de su entreguista camino.

Mencionaremos una parte de la descripción, sólo para que nos demos cuenta de la magnitud de la obra: “Esta plataforma está conformada por tres módulos turbocompresores de alta presión, dos plantas de deshidratación de gas de alta presión, tres turbogeneradores, dos plantas de endulzamiento de gas amargo, un quemador de gas elevado de alta presión, un motogenerador de emergencia, e instalaciones de servicios auxiliares.”


Si hubiera otra dirección en Pemex, habría anunciado esto desde que ocurrió, hace casi un año, pero ya sabemos lo que dicen en sus discursos.