Pedro Matías - Proceso
OAXACA, Oax. (apro).- La Caravana Nacional por la Defensa del Agua,
el Territorio, el Trabajo y la Vida, encabezada por la tribu yaqui,
llegó al Istmo de Tehuantepec, donde sus integrantes fueron recibidos
por indígenas mixes, zapotecos y huaves, quienes también mantienen una
lucha contra proyectos transnacionales que han roto el tejido
comunitario.
La caravana hizo su primera escala en Matías Romero, continuó en
Juchitán y finalmente llegó al municipio de San Dionisio del Mar, donde
fueron recibidos por integrantes de la Asamblea Popular del Pueblo
Huave.
Después de recorrer los estados de Chiapas, Tabasco y Veracruz, la
caravana yaqui llegó alrededor de las 11:00 horas al Centro
Agroecológico Yakjxonax (Tierra Bonita) que se ubica en el Polvorín,
Petapa.
Proveniente de Acayucan, Veracruz, la caravana encabezada por el comandante Molina fue recibida por maestros de la sección 22.
Luego participaron en una marcha en Matías Romero para protestar en
las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), donde
realizaron un mitin y acusaron los abusos que comete esta empresa, al
tiempo que denunciaron la criminalización que promueve en contra de
luchadores sociales.
Por su parte, el representante de la tribu yaqui llamó a pueblos y
organizaciones a defender el agua y el territorio de los pueblos
originarios y a luchar de manera unificada en defensa de sus derechos.
Mientras, el representante del Sindicato Mexicano de Electricistas,
Hugo Ortega, denunció cómo miles de familias han perdido su fuente de
ingresos y alertó sobre el significado de las reformas estructurales que
sólo provocan la privatización del patrimonio nacional y el
empobrecimiento del pueblo.
En tanto en la colonia Oaxaqueña, un asentamiento urbano habitado por
familias mixes, fueron retenidas dos camionetas de la CFE por realizar
un operativo de corte masivo de energía y, ante la amenaza de
incendiarlas, los trabajadores decidieron reconectar el servicio.
Ya en Juchitán, los inconformes yaquis fueron recibidos por
defensores de la tierra y el territorio y posteriormente se trasladaron a
San Dionisio del Mar.
En 2013 la SCJN falló contra la autorización de la manifestación de
impacto ambiental que la Semarnat otorgó al gobierno de Sonora para
construir el acueducto Independencia, con el cual se llevará agua de la
cuenca del río Yaqui hacia Hermosillo.
La Semarnat emitió el permiso sin cumplir la obligación legal de
informar, consultar y buscar el consentimiento de las comunidades
indígenas, recordaron el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, Servicios
y Asesoría para la Paz (Serapaz) y otras decenas de organizaciones.