miércoles, 25 de junio de 2014

Desigualdad en el gobierno de Calderón generó más violencia: Banco Mundial

24 junio 2014 | Mathieu Tourliere | Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- Desde que Felipe Calderón inició la “guerra contra las drogas” en 2007, cada vez que se incrementa la desigualdad en los ingresos de la población en los municipios mexicanos, crece la tasa de homicidios, reveló un reporte del Banco Mundial.
Para realizar su reporte, el organismo mundial se basó en el “coeficiente de Gini”, que desciende de uno a cero y mide la distribución de los recursos entre la población. Por ejemplo, en un país imaginario, donde el coeficiente de Gini es uno, sólo una persona acapararía toda la riqueza. Por el contrario, en un país con un coeficiente de Gini de cero, todos los habitantes tendrían ingresos idénticos.

Con esta base, según el documento difundido el 1° de junio y titulado “Desigualdad de Ingresos y Crimen Violento, Evidencia desde la Guerra contra las Drogas de México”, hasta 2005 el incremento del coeficiente de Gini no conllevaba una mayor tasa de criminalidad en los municipios del país.

Los economistas que redactaron el informe explican que el incremento de la tasa de criminalidad en un municipio fomenta la migración de la población más rica.

Al irse los más ricos, se quedan los hogares menos adinerados, lo que reduce la tasa de desigualdad. Por lo tanto, los municipios pobres, pero cuyos habitantes obtienen ingresos homogéneos, tienden a sufrir de mayores índices de criminalidad.

Además, los municipios donde los ingresos son los más desiguales no son necesariamente los más afectados por el crimen, anota el reporte, ya que la clase rica dedica mayores recursos hacia fuerzas policiacas y seguridad privada.

Singularidad mexicana

Sin embargo, entre 2005 y 2010, un incremento de un punto del coeficiente de Gini en los municipios mexicanos produjo un disparo de la tasa de homicidios ligados al narcotráfico de 10 por cada 100 mil habitantes. En 2007 pasó de 9.5 por cada 100 mil habitantes a 20 por 100 mil habitantes en 2010.

Los resultados, añaden los economistas, ilustran la singularidad del caso de México entre 2005 y 2010 y la responsabilidad de la política de Felipe Calderón en el aumento de los homicidios en el país.

“Esto demuestra que es la combinación de la disminución de los costos (asociados con la expansión de los carteles) con el aumento de los ingresos de la actividad criminal (asociada con la desigualdad creciente) que tienen un impacto sobre la tasa de criminalidad”, asevera el informe.

La tasa de desigualdad se redujo en México en los últimos 15 años: El coeficiente de Gini disminuyó de seis puntos entre 1996 y 2010, al pasar de 0.547 a 0.475, pero volvió a crecer entre 2010 y 2012, lo que implica que se incrementó ligeramente la desigualdad.

Entre 2005 y 2010, el coeficiente de Gini se redujo en 73% en los municipios del país, abunda el informe. Observa que al mismo tiempo en los demás municipios “se notó un incremento de la desigualdad”.

Aún así, “México sigue siendo uno de los países de Latinoamérica cuya poca movilidad de los bajos salarios representa un problema generalizado”, añade.

A raíz de la guerra contra las drogas, entre 2007 y 2011 se disparó la tasa de homicidios en un 120% anual. Los homicidios relacionados con el narcotráfico representan desde este entonces el 73% de los homicidios que se cometen en el país, señala el reporte.

Antes de lanzar el ejército contra el narcotráfico, esta tasa se reducía en promedio 32% anual año desde los años 1990, subraya.

El reporte continúa: “en este contexto, los resultados implican que si México no hubiera conocido un mejoramiento en términos de igualdad, el incremento de crímenes ligados a las drogas pudiera haber sido más dramático aún”.

Guerra contra las drogas

Los economistas sostienen que, en términos reales, el ingreso por persona en México en 2010 fue inferior al de 1990, debido a la “crisis del Tequila” en 1994-1995, la explosión de la burbuja Internet en 1999-2001 y la crisis financiera mundial de 2008.

Además, la guerra contra las drogas de Felipe Calderón redujo la actividad económica y el crecimiento a nivel municipal entre 2006 y 2010: El Banco Mundial estima que en 2010 el crimen costó a sus víctimas un total de 12 mil 900 millones de dólares y que 42.8% de empresas invirtió dinero en servicios de seguridad privada, a la que destinó el equivalente de 2.2% de sus ventas anuales en promedio.

Y recuerda que en poco menos de la mitad de los municipios –mil 32 de los 2 mil 456 que forman la República— siguen operando carteles de narcotráfico, sobre todo en los estados de Michoacán, Estado de México, Guerrero, Jalisco, Chihuahua, Nuevo León y Zacatecas.

Fuente: Proceso