19 marzo 2014 | Nurit Martínez| El Universal
Los sindicatos del magisterio disidente y de electricistas, unidos con organizaciones sociales y campesinas, se movilizaron contra la reforma energética y anunciaron que 2014 será el año de la resistencia y de las movilizaciones para frenar las reformas estructurales, debido a que sólo “empeoran las condiciones económicas y sociales” de los trabajadores y ahondan “los abusos y el despojo” sin que nadie se oponga.
Al concluir la marcha por la conmemoración del 76 aniversario de la Expropiación Petrolera, en un templete colocado frente a Palacio Nacional, los dirigentes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), representantes de organizaciones sociales como el sacerdote Miguel Concha, acusaron que las reformas estructurales sólo lesionan la soberanía nacional.
Las organizaciones que se integraron en la Nueva Central de Trabajadores, el 23 de febrero, presentaron un documento para pedir recuperar el petróleo y la electricidad e iniciar la organización de lo que será la “respuesta combativa ante la inminente ofensiva en contra de los derechos humanos y laborales”.
Luego de la marcha que partió del cruce de Reforma y la glorieta de La Palma, cuya afluencia elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del DF calcularon en unas cinco mil personas, los dirigentes del contingente respaldaron la iniciativa de Miguel Concha de aplicar la consulta popular para revertir la reforma energética.
“Vamos a la democracia participativa, a la democracia directa, como hoy la tienen países de Europa”, instó Concha, y afirmó que es momento de la sociedad civil y de los mexicanos de ejercer el derecho a la justicia, la equidad, el empleo y la salud.
Para la mayoría pasó desapercibida la presencia de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, quien dijo a los asistentes que habrá que seguir con las acciones para derogar la reforma energética.
