lunes, 9 de septiembre de 2013

Inversión privada en la CFE ya es del 35%, dice el Suterm

9 septiembre 2013 | Carlos Torres Oseguera | Corresponsal | La Jornada Michoacán
Lázaro Cárdenas, 8 de septiembre.- La necesaria ampliación de la terminal de Carbonser para atender la demanda diaria de carbón en la termoeléctrica Plutarco Elías Calles, que se ubica en Petacalco, Guerrero, estaría sujeta a la reforma energética.
La terminal se construyó para enviar un máximo de 16 mil 500 toneladas diarias, acorde con la capacidad instalada de la termoeléctrica; sin embargo, desde marzo de 2010 se adicionó una séptima unidad y la termoeléctrica aumentó su capacidad de generación eléctrica 2 mil 100 a 2 mil 900 megawatts, lo que incrementó el consumo de carbón de 16 mil 500 toneladas a 21 mil 500 diarias, por lo que resulta urgente la ampliación de patios para almacenaje y estiaje del mineral, señaló Jaime Valencia González, secretario general de la sección 117 del Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (Suterm).

De hecho, señaló el dirigente sindical, en la Comisión Federal de Electricidad (CFE) el 35 por ciento de la inversión ya es del sector privado, por lo que no se descarta que el gobierno federal perciba las futuras inversiones privadas en torno al sector eléctrico en la zona de la desembocadura del río Balsas.

En este sentido, destacó que hay dos proyectos pendientes de inversión de la CFE en la zona. Uno se refiere a la ampliación del muelle de Carbonser y otro consiste en concretar qué se hará en el denominado predio de La Paloma dentro del recinto portuario, donde la anterior administración federal aspiraba a erigir una planta de producción eléctrica “limpia”.

El predio de La Paloma, un territorio de un millón 993 mil 449 metros cuadrados, podría ser absorbido en parte por la terminal de Carbonser que requiere más patios de almacenaje de carbón para suministrarlo a la planta de Petacalco.
Carbonser suministra carbón a la termoeléctrica Plutarco Elías Calles, que se ubica en Petacalco, Guerrero ■ Foto: Carlos Torres