Héctor Briseño | Corresponsal | Periódico La Jornada | Lunes 25 de febrero de 2013, p. 33
Acapulco, Gro., 24 de febrero. Integrantes del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a la presa La Parota (Cecop) se declararon en alerta roja luego que el Ejército Mexicano allanó una vivienda de la localidad Los Huajes, perteneciente a los bienes comunales de Cacahuatepec, en la zona rural de Acapulco, donde la Comisión Federal de Electricidad pretende construir una presa hidroeléctrica desde 2003.
La noche del jueves pasado los militares irrumpieron en la casa, propiedad Joel Blanco Sánchez, hijo de Julián Blanco, dirigente opositor a la presa. En asamblea de comuneros efectuada en la comunidad Aguacaliente, el vocero del Cecop, Marco Suástegui Muñoz, advirtió que si el Ejército Mexicano sigue en la zona el Cecop reinstalará los cinco retenes que colocó al inicio de su movimiento, en 2003.
Suástegui Muñoz recalcó que la autodefensa siempre ha existido en los bienes comunales de Cacahuatepec, pero de manera legal y pacífica, en contra de la presión gubernamental por construir la presa.
Subrayó que el gobierno federal ha etiquetado mil 500 millones de pesos para la reactivación del proyecto La Parota y que “no son casualidad” los abusos de los militares en el área colindante con el río Papagayo.
A los integrantes de la asamblea les propuso “ir pensando en reinstalar los cinco plantones para evitar el paso del Ejército Mexicano y los delincuentes”. Señaló que “existe un rumor muy fuerte en el gobierno estatal: que el movimiento de autodefensa ciudadana que se inició en Ayutla se trasladará a Acapulco a través del movimiento del Cecop, lo cual es mentira”. Puntualizó que los miembros del Cecop no se armarán ni se cubrirán el rostro.
Sin embargo, “Acapulco está a punto del estallido social por las extorsiones, los secuestros y las cuotas. La gente ya no aguanta”.
Fuente: La Jornada
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