Héctor Moctezuma - Opinión EMET | Martes 18 Septiembre 2012
Se construyó a mediados de los ochenta, como símbolo de la administración de la abundancia, que nos daría la riqueza petrolera: Ha sido por décadas un símbolo, pero de la impunidad, de la más grande corrupción que existe en el país. Pemex fue el gran botín de los priístas, ahora lo es de los panistas.
Tan sólo en la actual administración, la empresa petrolera nacional ha generado más de 300 mil millones de dólares por ventas externas y 2 billones de pesos, por el comercio interno, ¿dónde están?
Tan sólo en la actual administración, la empresa petrolera nacional ha generado más de 300 mil millones de dólares por ventas externas y 2 billones de pesos, por el comercio interno, ¿dónde están?
Simple y sencillamente no aparecen. Están en los bolsillos de muchos panistas, ¿serán Jordi Herrera, Germán Martínez Cázarez, César Nava, Carlos Romero Deschamps, o el propio Felipe Calderón y su familia?
Si Enrique Peña Nieto le entra a este asunto, no solamente trascenderá como ningún presidente ha trascendido desde que los Adolfos ocuparon la Presidencia de la República.
No en vano Felipe Calderón hace hasta lo imposible por agradar al Presidente electo, hasta acepta que le rechace la invitación a dar el grito en Palacio y muchas otras cosas más. Quiere dar la impresión de que todo está arreglado. En diciembre, o en enero, a más tardar lo sabremos.
Si el combate a la corrupción en el nuevo gobierno, se hace una realidad, Enrique Peña Nieto estará muy por encima de todos los priístas y panistas que nos han gobernado en los últimos 80 años y arraigará al PRI en Los Pinos durante muchos años más. El mexiquense está ante una gran oportunidad de trascender, hasta ahora lo ha hecho bien y debe aprovechar su posicionamiento.
Hay motivos suficientes para que Juan José Suárez Copel y Carlos Romero Deschamps, permanezcan el resto de su existencia tras las rejas, ellos y muchos más. Peces gordos quiere la población en el bote.
Fuente: EMET
