miércoles, 6 de junio de 2012

“Si les falla la guerra sucia, van por el fraude”, anticipa AMLO

5 junio 2012 | Rosalia Vergara | Proceso
CELAYA, Gto. (apro).- En este feudo panista, considerado por la izquierda como cuna del fraude de 2006, miles de personas alzaron su voz para ofrecer su apoyo al candidato presidencial de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, quien pidió a los guanajuatenses estar muy atentos para evitar un fraude electoral el próximo 1 de julio.
En un concurrido y emotivo mitin de campaña al que acudieron el empresario Alfonso Romo, el senador Carlos Navarrete –a quien la multitud le pidió a gritos que se bajara del templete– y la candidata a diputada Malú Micher, entre otros, el tabasqueño reiteró lo dicho en el acto que horas antes encabezó en Puruándiro, Michoacán.

Los priistas, dijo, andan muy nerviosos por el despeñadero de su aspirante presidencial, Enrique Peña Nieto, y por eso ya comenzaron con la reedición de la “guerra sucia”. Como ocurrió en el 2006, si no les funciona le apostarán al fraude, agregó.

En ese momento, la gente coreó más de tres veces: “Fuera Peña”.

“Somos muchísimos los que estamos contigo AMLO”, gritaron miles de personas que se dieron cita en la calzada independencia, junto a la catedral del Sagrado Corazón y la Iglesia de San Francisco.

En el mitin organizado en esta ciudad, el tabasqueño citó una declaración que hizo Gerardo Mosqueda, exsecretario de Gobierno de Juan Manuel Oliva, en el sentido de que hubo 300 mil votos falsos que se sumaron al conteo de boletas en la última elección presidencial.

Eso, dijo López Obrador, es una prueba del fraude, tomando en cuenta que según la calificación del Instituto Federal Electoral (IFE), el exjefe de Gobierno del Distrito Federal perdió por 270 mil votos de diferencia.

En ese sentido, el candidato de la coalición “Movimiento Progresista” pidió vigilar el proceso electoral, porque además –añadió– su campaña proselitista va en ascenso.

“Ya me los imagino conspirando: ‘Vamos a iniciar la guerra sucia contra Andrés Manuel, como en el 2006’”, explicó. Sus seguidores respondieron: “No estás sólo. No estás sólo”.

Horas antes, ante cientos de personas de Puruándiro, Michoacán, cabecera municipal administrada actualmente por el panista Juan Arriaga Ayala –hasta 2011 fue ayuntamiento perredista–, el candidato de las izquierdas dijo estar seguro de que lleva la delantera en las preferencias electorales, porque han arreciado los ataques en su contra.

“Peña (Nieto) va en picada y yo voy para arriba. Hoy estoy seguro que ya llevamos la delantera porque ya empezaron a arreciar los ataques. Ya iniciaron otra vez la guerra sucia, como en 2006, con eso de que yo era un peligro para México. Están nerviosísimos, pero al pueblo lo pueden engañar una vez, sin embargo no lo pueden engañar siempre”, resaltó.

En el mitin organizado cerca de la Parroquia del Señor de la Higuerita, López Obrador habló de sus propuestas de campaña y criticó al gobierno federal por apoyar sólo a 1% de la población y dejar al resto en la indefensión.

La gente de las comunidades de San Pedro, Las Ranas, Santa Clara, Issac Arriaga y San Nicolás gritó fuerte cuando el tabasqueño prometió acabar con la corrupción en el ámbito gubernamental. Los funcionarios, explicó, deben ser administradores del dinero del pueblo.

Además, puntualizó que con el combate a la corrupción se ahorrarán 300 millones de pesos. Se etiquetarán correctamente 6 mil millones de pesos ahorrados, que equivalen a 60 años de presupuesto, destacó.

Tras ello, prometió serenar al país con la generación de empleos. Y “con más escuelas”, gritó uno de los asistentes.

El candidato de los partidos de la Revolución Democrática, del Trabajo y Movimiento Ciudadano se comprometió a crear “ambientes de optimismo nacional” bajando el precio de las gasolinas, el gas y la luz, entre otros. Los aplausos y ovaciones tronaron fuerte.

Además, por primera vez en su campaña, López Obrador se refirió al cristianismo como sinónimo de humanismo, que significa –puntualizó– atender primero a quienes más lo necesitan.

Y bajo esa premisa prometió gobernar el país si gana la elección presidencial el próximo 1 de julio.


Fuente: Proceso