viernes, 3 de febrero de 2012

Buscan convertir el Distrito Federal en territorio libre de maíz transgénico

Laura Gómez | Periódico La Jornada | Viernes 3 de febrero de 2012, p. 37
Con el propósito de proteger y contrarrestar la amenaza que enfrentan las 60 razas nativas de maíz en el país, por la introducción de variedades transgénicas, y apoyar a las comunidades que participan en los procesos de producción y conservación de éste, Martha Delgado, titular de la Secretaría de Medio Ambiente local, inauguró ayer el primer laboratorio de diagnóstico molecular para la vigilancia del grano.

Acompañada por la rectora de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), Esther Orozco, señaló que el objetivo es preservar las 40 razas que existen en el Distrito Federal y hacer de éste una zona libre de maíz transgénico, mediante la obligación de los cerca de 2 mil productores que reciben ayuda de las secretarías de Medio Ambiente o de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades, de certificar sus siembras.

En el laboratorio, que tuvo un costo de 4.6 millones de pesos, será posible además identificar el ADN (ácido desoxirribonucleico, macromolécula encargada de la transmisión hereditaria) en productos procesados, realizar árboles filogenéticos, asociación o diferenciación genética de las razas o variedades de una especie, y el diagnóstico y control de plagas y enfermedades que afectan a cultivos y plantaciones, indicó.

Se trata, explicó Orozco, de uno los proyectos científicos y sociales más importantes para la ciudad de México: proteger el maíz, pues México posee la mayor diversidad en el mundo. En el altiplano central se encuentra uno de los centros de origen y domesticación de esta gramínea; se han catalogado cerca de 60 razas de maíz mexicano, de las cuales 40 se cultivan en el Distrito Federal.

De ahí la importancia de contar con este laboratorio, fruto de la colaboración que inició con el proyecto de investigación Conservación uso y biodiversidad del maíz en el suelo de conservación del DF, donde participan también las autoridades federales, para detectar genes extraños que se han introducido en el maíz y pueden contaminar nuestras especies.

Hoy día, 95 por ciento de las 2 mil toneladas de maíz que se producen al año son para autoconsumo y sólo sirven para el consumo de un día en la capital, comentó a su vez el gerente del sistema producto-maíz, Jorge Hurtado.