Debe haber al menos 4 por cada 100 mil empleados; en el país la cifra no llega a uno
Reporta la Familia Pasta de Conchos diversas anomalías sobre el tema en la STPS
Fabiola Martínez
Lunes 9 de mayo de 2011, p. 41
El número de inspectores federales del trabajo en México es inferior al nivel recomendado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), máxima agencia de las Naciones Unidas para esta materia.
En todo el país hay 376 inspectores que deben atender miles de centros de trabajo de los sectores agrario, industria, construcción y servicios. En el caso de Coahuila, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) reporta 19 plazas en ese rubro, de los cuales 11 atienden la región carbonífera.
La OIT indica a los gobiernos que deben tener por lo menos cuatro inspectores por cada 100 mil trabajadores, mientras que en nuestro país esta relación no llega ni a uno por cada 100 mil, denunció la organización Familia Pasta de Conchos.
Después de los hechos en esa mina, en febrero de 2006, con saldo de 65 muertos (63 permanecen enterrados ahí) fue ampliada la plantilla de inspectores quienes, de acuerdo con organizaciones consultadas son empleados que perciben salarios de siete mil pesos al mes.
En tanto, los funcionarios de la STPS, que encabeza Javier Lozano, tienen ingresos muy por encima de ese rango y utilizan millonarios recursos para el pago, por ejemplo, del alquiler de un edificio en Paseo de la Reforma (Glorieta Colón) a donde el funcionario trasladó su despacho.
De acuerdo con el más reciente informe de la Familia Pasta de Conchos, elaborado con base en datos oficiales obtenidos en Coahuila y en el Distrito Federal, los inspectores federales son insuficientes. Sin embargo, sus indagatorias y conclusiones no han sido tomadas en cuenta para revertir la situación de la zona carbonífera.
Precisó que pese a las verificaciones oficiales, sólo una mínima proporción de trabajadores de las minas de carbón tiene seguridad social y otras condiciones laborales que la ley exige.
“El secretario Lozano tiene qué contestar por qué disminuyó el presupuesto de STPS en materia de seguridad y salud y pasó el dinero a promoción del empleo, que también es insuficiente".
"Me pregunto por qué los burócratas de mediano y primer nivel han incrementado su sueldo 20 por ciento y los inspectores del trabajo siguen ganando 7 mil pesos mensuales. Ese tipo de información es la que pretende ocultar Lozano con su verborrea y las fotografías tan insulsas que toma y difunde del accidente en Sabinas. Son acciones que insultan", señaló Carlos Rodríguez, integrante de dicha organización, así como del Centro de Acción y Reflexión Laboral.
La STPS destaca en su página electrónica que en 2006 había 218 plazas de inspector y que actualmente son 376. Del caso Coahuila, al inicio del sexenio había 11 inspectores y, de éstos, cinco estaban registrados para la zona carbonífera (Sabinas). Este año, las plazas son 19 en aquella entidad y 11 en la región de minas de carbón, lo que significa un aumento –presume la dependencia– de 120 por ciento.