Escrito por Pilar Ramírez
Juan Galindo.- Recientemente dirigentes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) han revelado las cifras de muertes de integrantes del gremio que van en aumento de manera histórica, el sindicalista José Antonio Almazán resaltó que el decreto presidencial de extinguir Luz y Fuerza del Centro (LyFC) fue más allá del “despido ilegal e injustificado de más de 44 mil trabajadores, hombres y mujeres a quien también acabó con sus sueños”.
Además generando a lo largo de estos casi 18 meses, de octubre de 2009 al 5 de abril de 2011, han muerto 635 trabajadores y jubilados electricistas en resistencia, precisó 600 jubilados y 35 trabajadores en resistencia, de los cuales se suman dos suicidios.
“Como consecuencia del hecho atroz e inhumano de haber visto cancelados sus sueños y esperanzas de vida; unos por problemas cardiovasculares, otros por males hepáticos, diabéticos, trombosis, etc., etc., pero todos ellos por enfermedades que se agravaron con el stress, la inestabilidad emocional, la depresión, la angustia, generadas por la canallesca decisión de un mal gobierno que nos arrebató nuestros trabajos y nos sometió a una calculada campaña mediática de descalificación y satanización acusándonos de corruptos y privilegiados ocasionándoles un irreparable daño moral”.
En las cifras que maneja el sindicato de electricistas no se incluyen los familiares directos como hijos, padres, abuelos, que “sufrieron en carne propia la desgracia de quedar desempleados”, al mismo tiempo truncados las expectativas de cumplir sus proyectos de vida.
De igual forma no se toman en cuenta el gran número de enfermedades que han acompañado a los electricistas en resistencia, las cuales se pueden atribuir al problema de desempleo; tan solo en esta zona, son varios los casos de intervenciones quirúrgicas del apéndice, también complicaciones por gastritis, sin tomar en cuenta el aumento de casos de diabetes.