Escrito por Verónica Bacaz, el 16-01-2011
Ante la escalada de precios en productos de la canasta básica, la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados prevé un aumento de 3 a 5 por ciento en los costos de sus platillos; por tanto, auguran que en los próximos días se realizarán modificaciones en sus menús o cartas.
“Desde que comenzaron a registrar incrementos en algunos artículos de primera necesidad, y el famoso ‘gasolinazo’; por tanto, en ese sentido para algunos restaurantes ya no es rentable y tienen que realizar algunos ajustes, e incluso, ya en pláticas con algunos afiliados, vislumbran un aumento”, explicó el presidente de la cámara, Ángel Adame Jiménez.
Después de que DDM documentó el alza de precios de algunos productos, como la tortilla, el aceite, el arroz y la leche, los restauranteros en estos días también llegaron a resentir este incremento, que afecta las finanzas de sus negocios; pues incluso ellos coinciden con los testimonios de las amas de casa en que los productos como el aguacate, el pollo y el limón se convirtieron ya en un lujo para poder adquirirlos.
No obstante, pese a los descuentos que los proveedores aplican al sector gastronómico, por las grandes cantidades que se cocinan en restaurantes, fondas y loncherías, los empresarios observan afectaciones económicas por los alimentos y también por el alza al precio de la gasolina y las tarifas eléctricas; así como las diferentes responsabilidades que deben cubrir, como es el pago de impuestos.
Adame Jiménez señaló que es necesario que las autoridades federales busquen que los precios de los alimentos estén controlados, así como crear incentivos para los productores del campo, para hacer crecer el agro mexicano.
Adame Jiménez comentó que otra situación que mantiene preocupados a los empresarios es el alto costo de las tarifas del suministro eléctrico que está aplicando la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“Después de un año, la CFE llegó con la espada desenvainada y comenzó a cobrar altos costos en las tarifas eléctricas; sin embargo, nos informó que en los próximos días se iba a regularizar la situación. Esperemos que así sea”, señaló el restaurantero.
Asimismo, comentó que ahora, con el cambio de los medidores, estarán al pendiente de que no se hagan ajustes extremos, pues un restaurante que antes pagaba alrededor de 5 mil pesos de luz, ahora tiene que desembolsar entre 15 y 20 mil pesos.
La Procuraduría Federal del Consumidor realiza diversos operativos de vigilancia en los centros de abasto, ello para evitar que los comerciantes cometan abusos en contra de los consumidores a través de la manipulación de las básculas, las cuales fueron inmovilizadas para corregir las fallas.
