lunes, 26 de septiembre de 2016

Otorgó la CFE a Ochoa Reza una liquidación millonaria… e indebida

Mathieu Tourliere y Homero Campa
CIUDAD DE MEXICO (proceso).- La renuncia de Enrique Ochoa Reza a la Dirección de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) fue costosa para el erario: el actual dirigente del PRI recibió una liquidación de 1 millón 206 mil 271 pesos por haber trabajado en esa empresa del Estado apenas dos años con 155 días. Es decir, de un jalón recibió el equivalente a nueve meses de su salario. Sólo que no le tocaba ese monto, afirma el abogado Manuel Fuentes Muñiz, especialista en derecho laboral. La razón: Ochoa se separó voluntariamente de su cargo. La fracción primera del artículo 33 del Manual de Trabajo de Servidores Públicos de Mando de la CFE establece que, “en casos de separación voluntaria por cualquier causa”, esta empresa otorgará una “compensación” al funcionario sólo después de que éste haya cumplido tres años de servicio… y a Ochoa le faltaban siete meses.

La “separación voluntaria” de Ochoa Reza al frente de la CFE quedó documentada en la carta que le envió al presidente Enrique Peña Nieto el pasado 8 de julio:

“El día de hoy le solicito con todo respeto me permita concluir este ciclo (como director de la CFE), por lo cual le presento a usted mi renuncia a dicho cargo”, escribió. “El motivo de mi renuncia obedece a la aspiración de participar en el proceso interno para la elección de presidente del Comité Ejecutivo Nacional de mi Partido, el Revolucionario Institucional”.

Sin embargo, ese mismo día, Ochoa –quien como dirigente del PRI encabeza una “cruzada contra la corrupción” y acusa al líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador, de mentir en su declaración “3de3”– acordó con la CFE un “dictamen de terminación laboral” para obtener una liquidación cinco veces mayor de la que le correspondía. Fundamentó su petición en la fracción segunda del artículo 33 del mencionado Manual de Trabajo de Servidores Públicos de Mando, que establece el pago de liquidación en caso de separación no voluntaria del cargo.

Pago indebido

“El pago a Ochoa Reza fue indebido. De acuerdo con el manual le tocaba ser liquidado con base en el supuesto de la renuncia voluntaria, no de la liquidación”, explica Manuel Fuentes Muñiz, catedrático de la Universidad Autónoma Metropolitana y especialista en derecho laboral.

Señala que el Órgano Interno de Control de la CFE debe tomar cartas en el asunto y, en su caso, “fincar responsabilidades” a los funcionarios que cometieron esta “falta administrativa”. Incluso considera que la Secretaría de la Función Pública “tendría que intervenir y plantearse el ejercicio de acciones penales, dado que existe la presunción del uso indebido de recursos públicos”.

En entrevista, Ochoa Reza sostiene que su proceso de liquidación fue legal e idéntico al que se aplicó con sus predecesores en los últimos 15 años. Afirma que él fue sólo un “sujeto pasivo” de un trámite interno de la CFE ya establecido. Reconoce que su separación fue “voluntaria”, pero afirma que la normatividad “no distingue” cuando ésta debe o no ser voluntaria. Asegura que con base en dicha normatividad se calculó “cómo terminaría mi relación laboral con la empresa”.

La alianza Méxicoleaks –de la que Proceso forma parte– realizó una investigación periodística sobre el proceso administrativo que permitió al actual presidente nacional del PRI cobrar una liquidación millonaria. Para ello se basó en documentos filtrados a través de su plataforma digital.

“La más alta liquidación”

El pasado 8 de julio, en su último día al frente de la CFE, Ochoa Reza acudió a la Gerencia de Relaciones Laborales de la empresa. Solicitó el “más amplio y eficaz finiquito”: 1 millón 725 mil 209 pesos, al que tendría que restar impuestos, hasta quedar en 1 millón 206 mil 271 pesos.

Este monto equivale a 253.35 días del salario diario integrado que Ochoa Reza cobró durante su periodo en el cargo, del 2 de febrero de 2014 al 9 de julio de 2016. Dicho de otro modo: la CFE pagó a su exdirector general mil 363 pesos por día, equivalente a dos días extras de sueldo por cada semana que estuvo en su nómina.

Jaime Tadeo Castelán Olguín, subgerente de Relaciones Laborales, y Karime Slim Ruiz, jefe del Departamento de Dictámenes, dieron su visto bueno a la liquidación millonaria, la cual quedó plasmada en el “dictamen de terminación de la relación laboral” número T.L. 49/2016. Ochoa Reza firmó para expresar su “conformidad”.

En ese dictamen, que fue filtrado a la plataforma Méxicoleaks, la CFE explica que la liquidación “se otorga a solicitud del C. Enrique Ochoa Reza”, y justifica “el otorgamiento de una gratificación especial por los servicios prestados, equivalentes a la más alta liquidación que establece el Manual de Trabajo de Servidores Públicos de Mando vigente (…) de tal manera que al Servidor Público de Mando se le otorga el más amplio y eficaz finiquito”.

Separación voluntaria

La CFE estimó el salario diario de Ochoa Reza en 6 mil 809 pesos, lo que incluye, además del salario base, la ayuda para renta de casa, el fondo de ahorro, la prima vacacional, el aguinaldo, el fondo de previsión, el transporte, la despensa, la “compensación garantizada” y el bono.

Para justificar el pago de 253 salarios mínimos diarios, el dictamen se apoyó en la fracción segunda del artículo 33 del Manual de Trabajo para Servidores Públicos de Mando de la CFE.

Esta fracción establece que, al liquidar a los servidores públicos de mando, la paraestatal les debe 120 días de salario, más 35 días por año de servicios prestados, más otros 20 días por cada año laborado, bajo el concepto de prima legal de antigüedad. La suma, en el caso de Ochoa Reza, se elevó a 253.35 días.

Sin embargo, el abogado Fuentes Muñiz asevera: dado que Ochoa Reza renunció a su cargo de manera voluntaria, la CFE debió aplicar la fracción primera del artículo 33, la cual se establece para los casos específicos de “separación voluntaria”.

Esta fracción prevé una liquidación de 20 días de salario por año de servicios para los trabajadores que renunciaron por voluntad propia. Incluye también un monto extra según la antigüedad del servidor público de mando, pero sólo para quienes cumplieron por lo menos tres años de labores en la CFE, lo que no fue el caso del actual presidente del PRI.

En este escenario, la CFE hubiera pagado a Ochoa Reza un finiquito equivalente a 48.49 salarios mínimos diarios; es decir, 330 mil 168 pesos brutos: 231 mil 118 pesos netos si se restan los impuestos.

Fuente: Proceso