Por
vía de mientras, ante la presencia del periodista mexicano Jorge Ramos
Ávalos (comunicador de la televisión con audiencia mundial desde el
territorio estadunidense), en un acto público donde pronunció un
discurso-perorata y convocó a una conferencia de prensa, éste ordenó a
sus guardaespaldas (Peter Padfield, Himmler y las SS y la Gestapo), que sacaran del lugar al periodista, porque éste le hizo unas preguntas que daban en el blanco
de las estupideces de Trump. Un periodista en funciones de reportero ha
de preguntar, como lo hizo Jorge Ramos; quien al regresar al lugar de
los hechos, a condición de plantear sus cuestionamientos, no bajó la guardia, y como “periodista, inmigrante y ciudadano estadunidense tenía el derecho a hacer una pregunta”.
Álvaro Cepeda Neri - Contralinea
Como ideología contra el pluralismo racial, el nazismo sigue vivito y coleando, con la misma mira puesta en deshacerse de quienes señala como enemigos a muerte de sus creencias fundamentalistas y de su pureza racial. Es un neonazismo resucitado en la misma Alemania, donde, como en Estados Unidos, están mostrando (más que el puño y enseñando los dientes), abiertas amenazas con la finalidad de eliminar a quienes ubican como sus rivales, queriendo resucitar ese viejo ajuste de cuentas con un precandidato como Donald Trump. Este nuevo Hitler está incitando a la solución final contra, cuando menos, 11 millones de mexicanos. Y en otra de sus locuras criminales asegura que mandará construir una pared en toda la frontera estadunidense-mexicana para aislar a su país, dice, de la contaminación racial de nosotros, sus vecinos.
Como ideología contra el pluralismo racial, el nazismo sigue vivito y coleando, con la misma mira puesta en deshacerse de quienes señala como enemigos a muerte de sus creencias fundamentalistas y de su pureza racial. Es un neonazismo resucitado en la misma Alemania, donde, como en Estados Unidos, están mostrando (más que el puño y enseñando los dientes), abiertas amenazas con la finalidad de eliminar a quienes ubican como sus rivales, queriendo resucitar ese viejo ajuste de cuentas con un precandidato como Donald Trump. Este nuevo Hitler está incitando a la solución final contra, cuando menos, 11 millones de mexicanos. Y en otra de sus locuras criminales asegura que mandará construir una pared en toda la frontera estadunidense-mexicana para aislar a su país, dice, de la contaminación racial de nosotros, sus vecinos.
Jorge Ramos Ávalos hizo el relato y la crítica al respecto en su columna semanal publicada en el diario Reforma (29 de agosto de 2015), que provocó la violenta naziconducta
de Trump, mandando a uno de sus pistoleros para que pisoteara la
Primera Enmienda de la Constitución Política de Estados Unidos, que
establece la libertad de palabra y de prensa. Fue un acto propio de un
dictadorcillo. Éste se arrepintió tras la presión de otros periodistas, e
hizo que Ramos Ávalos volviera al recinto. El periodista insistió en
sus preguntas sobre cómo pensaba Trump deportar a 11 millones de
mexicanos indocumentados; cómo les quitaría la ciudadanía a hijos de
indocumentados y cómo construiría el muro en la frontera. El republicano
millonario, que utiliza a trabajadores mexicanos, tenidos allá como
excelentes artesanos de la albañilería, respondió con sus clásicas
bravuconadas.
El caso de Ramos Ávalos –con diferentes
características– se repite en los regímenes que desprecian las
libertades. Y, sobre todo, las de prensa, y más cuando éstas son
ejercidas por el trabajo de los reporteros. Estos derechos y sus
garantías constantemente son limitados y hasta cancelados –sino de jure, al menos de facto–,
hasta por quienes tienen la obligación de contestar las preguntas; y lo
hacen con evasivas o con acciones de fuerza para tratar de callar al
periodista. Éste ha sido el caso de Jorge Ramos, quien tiene una
trayectoria de periodista crítico con fundamentos, tanto en sus
programas en la cadena estadunidense Univisión, como al publicar su
trabajo escrito. “Me han acusado de ser un activista. Pero soy,
sencillamente, un periodista que hace preguntas. Lo que pasa es que como
periodista es necesario tomar partido y asumir un punto de vista cuando
se trata de racismo, discriminación, corrupción, mentiras públicas,
dictaduras y derechos humanos… Debemos tomar partido, decía el Premio
Nobel de la Paz 1986, Elie Wiesel. La neutralidad ayuda al opresor,
nunca a la víctima” (Jorge Ramos Ávalos, “El candidato y el periodista”,
Reforma, 29 de agosto de 2015).
No hay duda de que Trump es un neonazi
precandidato presidencial al cargo estadunidense. Su racismo es de corte
hitleriano. Anda en busca de “soluciones finales” contra los mexicanos.
Y al identificar a Jorge Ramos como un mexicano y reportero se le fue
encima con su jerga machista. También ha insultado a varias mujeres
practicando el feminicidio verbal. Demostró que es un patán en
busca del poder político haciendo alarde de su poder económico, para
imponerse explotando prejuicios. La embestida a Jorge Ramos ha sido una
muestra más de que Trump es un candidato que no está sólo posando para
el espectáculo electoral, sino que ha tomado en serio su convicción de
deshacerse de los inmigrantes mexicanos.
Como los nazis, busca un culpable de los males ahora estadunidenses y, enloquecido, encontró a su chivo expiatorio.
Su ataque al periodista mexicano Jorge Ramos, por ser mexicano y
periodista, ha sido una muestra de que Trump es un tipo que usa sus
libertades para querer cancelar las de los demás. Y no es un payaso de
la politiquería. Es un neonazi que encontró, en el contexto de las
libertades, el método para sus aspiraciones; pero pretende negarlas a
quienes discrepan de él, como cuando el reportero hace preguntas a sus
temerarias propuestas. Ha hecho el reportero Jorge Ramos Ávalos su
trabajo, con valentía y dignidad, entendido el periodismo como
contrapoder para investigar y cuestionar a los que estén en los poderes
políticos y económicos. Y a los que aspiran a tenerlos, atacando de
antemano a las libertades de expresión.
Álvaro Cepeda Neri*
*Periodista
Contralínea 456 / del 28 de Septiembre al 04 de Octubre 2015