Enrique Galván Ochoa - Dinero
¿Alguna vez escucharon
que el presidente de la República en turno, o su secretario de Hacienda,
hayan asumido la culpa de una devaluación? Yo tampoco. Siempre le han
echado la culpa a alguien: los ‘‘malos mexicanos’’ que sacaron su dinero
del país, los ‘‘capitales golondrinos’’, la crisis de Estados Unidos, o
la de Europa, en fin. Ahora tienen nueva villana: China. Sin desconocer
los severos desarreglos que ha provocado en el mundo su política
monetaria, la devaluación del peso no puede atribuirse exclusivamente a
los chinos. Cuenta, y mucho, la caída del precio del petróleo pero, y
paralelamente, que el gobierno mexicano haya dilapidado el río de
dólares que trajo el periodo de precios altos –tres presidentes, Fox,
Calderón, Peña Nieto. Cuenta que durante esos tres sexenios –y antes– la
economía permanezca exánime, yerta. Estas circunstancias hacen que los
inversionistas pierdan la confianza en los bonos en pesos emitidos por
el gobierno mexicano –aunque pague tasas de interés muy altas– y se
estén deshaciendo de sus posiciones. Ahí está la clave de la
devaluación. No se vale, pues, echarle la culpa a China.

Respirando por la herida
En diversos círculos se especula sobre la posibilidad de
que los priístas hubieran ganado la simpatía de Washington a su regreso
al gobierno –o al menos, la no oposición–, pagando con la reforma
energética. Con petróleo, para decirlo con claridad. Así se explicaría
la intervención de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, en el
diseño de la apertura. Sin embargo, no pensaron que el mercado se
desplomaría. El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, decía
ayer que los precios del petróleo seguirán bajos y no se prevé un cambio
en el corto plazo, pero esto no afectará la reforma energética
emprendida en el país. En otras palabras, la cuenta pendiente podría ser
abonada con electricidad, gasoductos, lo que les pidan. Ayer el barril
de Pemex bajó a 33.71 dólares, una tercera parte de su precio a fines
del año anterior.
Infieles delatados
Tan importante como el dinero es el sexo, dicen por ahí, y
no falta quien asegura que éste es más que el otro. ‘‘La vida es corta.
Ten un amorío’’ es el slogan de el portal de citas entre personas
casadas de Ashley Madison, orientado a comunicar a las que buscan un affaire
de un modo relativamente fácil y rápido, aunque no barato. Asegura que
cuenta con 40 millones de usuarios en todo el mundo, probablemente un
millón son mexicanos o estadunidenses de origen mexicano. La mecánica es
relativamente sencilla: tú colocas tus datos en el portal, inclusive
una o varias fotos (no se admiten desnudos), te presentas y describes el
tipo de persona que andas buscando. Hay historias que terminan bien y
otras mal.
La semana pasada Ashley, en medio del vendaval financiero, se vio envuelta en el escándalo después de que piratas hackearan y
extrajeran los datos de más de 30 millones de suscriptores e hicieran
públicos los nombres, correos electrónicos, números telefónicos y
transacciones. También –¡horror!– tarjetas de crédito. Los afectados han
pasado del temor de ser descubiertos a la indignación de ver vulnerados
sus datos personales y su dinero. Despachos de abogados preparan
demandas contra Ashley. El jueves anterior dos firmas canadienses
presentaron una demanda por $578 millones a la Corte Superior de
Justicia de Ontario. Avid Media, la compañía que opera el portal, ha
ofrecido una recompensa de 500 mil dólares canadienses a quien ofrezca
información de los implicados en el hackeo. (Por el Chapo Guzmán
ofrecen más). En lo más reciente, la policía de Toronto está
investigando dos informes de suicidio con posibles vínculos con el
escándalo Ashley Madison.
@Vox Populi
Asunto: Las cuentas no checan
Los funcionarios de nuestro gobierno creen que tenemos
aserrín en nuestro cerebro y que no pensamos. Me refiero específicamente
al secretario de la Función Pública, que en su exoneración de la Casa Blanca,
cita que la señora Angélica Rivera recibió por parte de Televisa 80
millones de pesos por concepto de sueldos y el resto se lo pagó con la Casa Blanca.
Pero la señora Rivera mencionó en su presentación ante las cámaras
cuando reclamó airadamente todo lo que se decía de ella, que Televisa le
había pagado 130 millones de pesos y que con parte de esos millones de
pesos había comprado la Casa Blanca. Por fin, pónganse de acuerdo.
Venancio Márquez Castanedo
R: Ellos manejan su aritmética particular. 2 y 2 son 4 pero también
son 22. Virgilio ya está más allá del bien y el mal en asuntos
materiales (ustedes me entienden).
Tuits
ECONOMÍA BIPOLAR: Inflación anual registra mínimo histórico de 2.64%, mientras #dólar alcanza nuevo pico en $17.50.
Noruega, el país más rico del mundo, sufre por el petróleo barato.
Liebano Saenz @liebano
México ‘‘libra’’ crisis económica dice @EPN; si ganara el mínimo y no fuera político, no diría esa barbaridad a la prensa nacional.