miércoles, 8 de julio de 2015

Seguros de salud, invalidez y vida del Issste, sólo ocho y 13 años más

Atender cinco enfermedades consume 26.5% del presupuesto anual: informe
El de riesgos de trabajo es solvente mientras el de prestaciones sociales y culturales resulta insuficiente, indica reporte financiero y actuarial IFA 2015, entregado al Congreso de la Unión
Ángeles Cruz Martínez | Periódico La Jornada | Martes 7 de julio de 2015, p. 35
Los seguros de salud, y el de invalidez y vida del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), cuentan con recursos para la atención de sus derechohabientes sólo para los próximos ocho y 13 años, respectivamente. Así lo indica el Informe financiero y actuarial (IFA) 2015, entregado al Congreso de la Unión.
Aunque hasta ahora el instituto reporta un balance financiero favorable, reconoce una diversidad de retos, entre ellos, que la atención de cinco enfermedades consume 26.6 por ciento de su presupuesto anual y que sus clínicas y hospitales tienen una antigüedad promedio de 25 años. Los hospitales de alta especialidad ubicados en 11 estados de la República y el Distrito Federal tienen 35 años.

El documento también advierte el desafío que representa para las finanzas institucionales que entre sus derechohabientes sea mayor el número de adultos mayores de 65 años de edad respecto de otras instituciones.

A escala nacional en 2014 este sector representaba 6.7 por ciento de la población; en el Issste era 14.4 por ciento. Para 2030, el organismo dará atención a 2.3 millones de personas mayores de 65 años, lo que equivale a un incremento de 42 por ciento respecto de 2014.

Hasta el año pasado, indica el documento, las principales causas de egresos hospitalarios tuvieron que ver con enfermedades relacionadas con vesícula biliar, atención de partos, insuficiencia renal y diabetes.

En el periodo del informe se otorgaron en total 25 millones de consultas médicas, se realizaron 251 mil cirugías, 906 mil urgencias y 363 mil hospitalizaciones.

El problema del Issste es que 26.6 por ciento del gasto del seguro de salud –6 mil 336 millones de pesos– se concentró en cinco enfermedades crónicas: cáncer de todos los tipos (7.6 por ciento), afecciones cardiovasculares (6.3 por ciento), hipertensión arterial (4.4), insuficiencia renal crónica (4.5) y diabetes mellitus tipo 2 (3.8 por ciento).

De mantenerse la tendencia actual, para el año 2050 estos padecimientos requerirán de una inversión de más de 45 mil millones de pesos, de acuerdo con las previsiones actuariales del instituto.

Llama la atención que los afiliados que viven con diabetes e hipertensión arterial constituyen 16 y 13.4 por ciento de la población derechohabiente.

Respecto de las finanzas, el IFA 2015 resalta que en 2014 obtuvo un balance favorable entre ingresos y gastos e incluso reportó un ahorro de 279 millones de pesos. Este resultado fue posible, indicó, por los 13 mil 70 millones de pesos recibidos como transferencias federales. Con este monto se pudieron solventar los gastos de los diferentes fondos.

En el apartado relativo a finanzas, el informe detalla que al 31 de marzo de 2015 cuenta con 65 mil 311 millones de pesos en reservas. Sólo en 2014 se agregaron 8 mil 636 millones de pesos, con un rendimiento promedio de 11.3 por ciento nominal.

Enseguida desglosa los datos sobre la situación de los seguros. El de salud tiene recursos con suficiencia de reservas para los próximos ocho años; el de invalidez y vida para 13 años; el de riesgos de trabajo es solvente, mientras el de prestaciones sociales y culturales es insuficiente.

Desde el informe de 2012, el Issste hizo notar que en un futuro habría que revisar las fuentes y montos de financiamiento, tal como establece la ley del Issste, en particular las aportaciones de dependencias gubernamentales y trabajadores.

El IFA 2015 reconoce la existencia de “riesgos que pueden afectar las operaciones del instituto; no obstante, se han instrumentado acciones de corto y mediano plazos para mitigar sus efectos. Ejemplos de ello son el Programa de Trabajo de Administración de Riesgos y el Programa de Aseguramiento Institucional”.

El primero incluye la “programación oportuna de citas médicas en las unidades de primer nivel de atención”, cumplir las sentencias en materia de pensiones en tiempo y forma, acotar el pasivo laboral generado por el Issste en su calidad de patrón, fortalecer los procesos operativos para atender el incremento en el número de pensiones y reducir la demanda extraordinaria de medicamento mediante una mejor planeación, entre otros.

Otras acciones puestas en marcha para beneficio de los derechohabientes es la eliminación del pase de vigencia presencial para jubilados y pensionados, el programa de fortalecimiento de Servicios e Urgencias y el inicio de actividades de la Escuela Nacional de Enfermería e Investigación en el Distrito Federal, Monterrey, Nuevo León y Zapopan, Jalisco.

Fuente: La Jornada