El reclamo de las comunidades al ayuntamiento de Atlixco, así como la defensa y organización que se estaba gestando en ese municipio para frenar el paso del gasoducto Morelos, fue el detonante que derivó en la persecución y detención de Enedina Rosas Vélez, comisariada ejidal de San Felipe Xonacayucan; del activista Juan Carlos Flores, vocero del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua de Puebla y Tlaxcala, así como de Abraham Cordero Calderón, quien es uno de los dirigentes que encabeza la lucha contra la construcción del Arco Poniente.
11 abril 2014 | Susana Rappo Miguez | La Jornada de Oriente
11 abril 2014 | Susana Rappo Miguez | La Jornada de Oriente
Como se dio a conocer por diversos medios, incluido éste, el miércoles 2 de abril por la noche el cabildo de la ciudad aprobó, por mayoría, la licencia de construcción para el gasoducto. En tanto, una comisión de campesinos que se niegan al paso de esa obra, pidió la intervención del Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales (Cupreder) y del Centro Nacional para la Prevención de Desastres (Cenapred) para demostrar que ese trazo significa peligro para las comunidades. Aprobación prácticamente a puerta cerrada en el salón principal de palacio, y con vigilancia de elementos de la Policía local. La respuesta de las comunidades afectadas fue su acción con miras a frenar la construcción del gasoducto que pasa por sus tierras. Además, no solo es el gasoducto, así como lo relatara Avelino Velázquez Tapia, comisariado de Bienes Comunales de San Juan Ameca, perteneciente al municipio de Atzizihuacan, quien ha denunciado y se ha enfrentado a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y las empresas privadas Elecnor, Abengoa y Enagas, de origen español, quienes pretenden construir una central termoeléctrica, además del gasoducto y al que quisieron también detener.
Hasta la fecha las comunidades afectadas han sido consistentes en frenar las obras, que además de no tomar en cuenta el riesgo volcánico presente en la región, busca y sienta las bases para transformar la zona no necesariamente en beneficio de sus pobladores. Esos que tienen que buscar y reciben a cuenta gotas información de los proyectos que intentan construir en sus territorios, de los cuales ellos no son ni serán partícipes.
Según la carpeta del “Proyecto Integral Morelos CCC Centro y Gasoducto Tlaxcala–Puebla–Morelos”, emitida por la Dirección de Proyectos de Inversión Financiada y Subdirección de Desarrollo de Proyectos de la Comisión Federal de Electricidad, publicada en julio de 2011, dicho proyecto consiste en la construcción de dos centrales de generación eléctrica de ciclo combinado de 620 MW cada una que consumen gas natural como energético, ubicadas en la comunidad de Huexca; un gasoducto para transportar el gas desde los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Tlaxco, Tlaxcala, al sitio de las centrales en Huexca, con una longitud de 160 km y 30” de diámetro, pasando por los estados de Tlaxcala, Puebla y Morelos, con una capacidad para transportar 9 mil 61 millones de litros de gas al día. Un Acueducto de 26” desde Cuautla a Huexca con longitud de 12 km, así como el tendido de una línea eléctrica de 400 kv. en 20 km de Huexca a la subestación Yautepec, con una inversión total es cercana a los mil 600 millones de dólares.
Es un proyecto de grandes dimensiones en el tiempo, un gran negocio para las empresas que necesitan la tierra y el agua para su concreción, y por ello buscan romper la oposición en las comunidades. Como no lo han lograda mediante el convencimiento ahora lo quieren hacer doblegando al movimiento mediante el encarcelamiento de sus dirigentes.
Fuente: La Jornada de Oriente
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