domingo, 22 de diciembre de 2013

Hasta 24 minisalarios costará una cena navideña, “sin alipús”


De 20 a 100 por ciento más caros, varios de los ingredientes de platillos de temporada
El jitomate encabeza el encarecimiento, con un incremento de 117% en un año, según Profeco
Susana González G. | Periódico La Jornada | Domingo 22 de diciembre de 2013, p. 28
Los ingredientes de las tradicionales cenas de Navidad se encarecieron de 20 a más de 100 por ciento respecto a diciembre del año pasado, revelan cifras del Sistema Nacional de Información e Integración (SNIIM) de la Secretaría de Economía.

Indispensable en la comida mexicana de toda temporada, sin que la de fin de año sea la excepción, y por lo mismo, importante por el impacto que causa en la inflación, el jitomate encabeza la lista de las hortalizas que reportan los mayores aumentos en este mes.

El tipo saladette acumula un incremento anual de 117 por ciento y el bola 68 por ciento en sus precios, pero tan sólo de una semana a otra subieron 33 y 13 por ciento, respectivamente.

Así, al menudeo el jitomate bola se comercializa entre 21.90 y 32.80 pesos por kilo en mercados y tiendas de autoservicio y el salatte oscila entre 24.90 y hasta 39.60 pesos, según los reportes de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

El SNIIM atribuye el aumento del saladatte a “una disminución de la oferta, principalmente del producto maduro, situación que se debe: en primer término a que la producción en Michoacán y Morelos está finalizando de manera anticipada; en segundo, las bajas temperaturas retrasan la maduración del jitomate tanto en esas entidades como en Puebla y Baja California; tercero, aunque ya inició la recolección en Sinaloa, la primera etapa de su cosecha viene disminuida a raíz de daños ocasionados a las siembras de esa entidad por las tormentas de septiembre; y por último, una parte de lo que se está recolectando en esta entidad se destina al mercado de Estados Unidos”.

Cebolla y papa

También se redujo la producción del jitomate bola ya que sólo se cuenta con la de invernaderos de San Luis Potosí y Michoacán, además de que su encarecimiento también fue consecuencia de las alzas del saladette.

Otros productos que acumulan alzas significativas respecto a cómo se vendían en la temporada navideña de 2012 son la cebolla, cuyo precio es 71 por ciento más caro (se vende de 18 a 28 pesos por kilo), la papa en 46 por ciento (el precio máximo es de 21.50 pesos) y los chiles que subieron desde 20 a 278 por ciento, dependiendo de la variedad. Alzas que el SNIIM también justifica por cuestiones climatológicas, como las recurrentes lluvias en Guanajuato, Michoacán, Morelos, Veracruz, Oaxaca y Tamaulipas.

Con tales aumentos reportados por las autoridades, una cena casera de Navidad para una familia de ocho personas que tan sólo incluya romeritos y bacalao como platos fuertes, más bolillos, una ensalada y refrescos, oscilará entre 930 y mil 593 pesos, dependiendo dónde se compren los productos, y sin que se incluyan bebidas embriagantes, ni siquiera cervezas.

Tales cifras equivalen a 14 y 24.5 salarios mínimos, que a su vez representan desde la mitad hasta casi la totalidad del ingreso mensual de 6.4 millones de mexicanos que sólo ganan “hasta un salario mínimo por día” y que representan el 13 por ciento de la población ocupada del país, de acuerdo con las cifras más actuales sobre empleo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Hay otros 11.8 millones o 23.9 por ciento de los mexicanos que trabajan, que ganan “más de uno y hasta dos salarios mínimos”, por lo que mínimo tendrán que gastar los ingresos de toda una semana para preparar una cena como la descrita.

El kilo de romeritos oscila entre 10 y 20 pesos, pero preparar dos kilos en casa con mole, tortitas de camarón, nopales y papas para ocho personas implicará un desembolso mínimo de 243 pesos y de hasta 444 pesos como máximo según los mercados o supermercados donde se adquieran, de acuerdo con los monitoreos de precios de Profeco. El costo máximo de 243 pesos casi cuadriplica el salario mínimo de 64.76 pesos que todavía está vigente hasta que concluya 2013 y el costo máximo por 444 pesos representa 6.8 veces más el minisalario.

Si además o en lugar de romeritos, la misma familia de ocho miembros quiere cocinar y degustar bacalao, que por sí sólo se vende de 179 a 288 por kilo, entonces lo menos que gastará serán 538 pesos (ocho salarios mínimos) por dos kilos junto con los ingredientes indispensables para cocinarlo como aceite de oliva, jitomate ajo, cebolla, aceitunas, chiles güeros, almendras y alcaparras. El desembolso se eleva hasta 949 pesos (14 minisalarios) por los mismos productos y cantidades, aunque hay familias que utilizan otros ingredientes o incluso agregan pimiento morrón o naranja para desflemar el bacalao.

A estos platillos hay que agregar desde los bolillos (de 0.90 a 1.90 por pieza), los refrescos (una Coca -Cola de 2 litros cuesta de 17 a 23 pesos y un Jarrito de igual cantidad 11 pesos) o alguna ensalada (el kilo de manzana se vende de 20 a 50 pesos), es decir, entre 150 y 200 pesos más aproximadamente.

Si en lugar de romeritos o bacalao, las familias optan por otros guisados propios de la temporada, el ingrediente principal supera por sí solo el minisalario ya que el kilo de pierna llega a 70 pesos, el de lomo a 97 pesos y el de pavo a 72 pesos.

Fuente: La Jornada