Las revelaciones de Der Spiegel les quita el sueño
Martín Esparza Flores | Revista Siempre No. 3150
Al trascender el espionaje de que fueron objeto durante su permanencia en el poder, los panistas lanzaron su grito al cielo y como en el caso del temeroso y azorado Felipe Calderón, trataron de blindarse, ante el riesgo de ser “desnudados”, hasta el tuétano de su quehacer político.
Calderón y sus ex funcionarios tienen motivos más que suficientes para caer en el insomnio y sudar frío luego de que la revista alemana Der Spiegel (el espejo), revelara que el exanalista de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA), Edward Snowden —actualmente asilado en Moscú—, comentó de la existencia una bomba informativa sobre la conducción privada con que los panistas manejaron el país y que de estallar, haría añicos sus mil y un mentiras regadas por los cuatro puntos cardinales.
Calderón y sus ex funcionarios tienen motivos más que suficientes para caer en el insomnio y sudar frío luego de que la revista alemana Der Spiegel (el espejo), revelara que el exanalista de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA), Edward Snowden —actualmente asilado en Moscú—, comentó de la existencia una bomba informativa sobre la conducción privada con que los panistas manejaron el país y que de estallar, haría añicos sus mil y un mentiras regadas por los cuatro puntos cardinales.
Con toda certeza, a los panistas les aterra que en la reconducción del proceso de acuerdos haya avances sustantivos en la mesa de diálogo que el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) sostiene con la Secretaría de Gobernación, no es casual que el exsecretario del Trabajo, Javier Lozano —y uno los más fieles lacayos de Calderón—, haya salido a tratar de denostar los logros alcanzados por nuestra organización.
De hecho y hay que puntualizarlo por la importancia que reviste en una solución de fondo al conflicto generado con el impositivo decreto del 11 de octubre del 2009, existen temas que deben revisarse a fondo para saber el porqué los valiosos recursos públicos, como el de la fibra óptica —propiedad de todos los mexicanos—, fueron entregados por estos pillos panistas a sus compañeros de partido, sin más requisitos que el de los negocios personales.
¿Por qué no optaron por esta vía los panistas? Por la sencilla razón de que ni los beneficios a los mexicanos ni la inyección de mayores ingresos a las arcas de la nación eran sus prioridades.
Puede inferirse por qué les preocupa de sobremanera que el espionaje aplicado a sus acciones de gobierno brinque de los ocultos terrenos de la confidencialidad a la luz pública. Sus fechorías cometidas en contra de la nación, como el cierre de Luz y Fuerza del Centro, mostrarían su lado oculto y perverso que lejos de haberse traducido en beneficios como mejorar la economía y representar sustanciales ahorros a las finanzas públicas, han empeorado la prestación del servicio, afectado a los millones de usuarios de escasos recursos, por la aplicación de cobros indebidos y tarifas injustas, permitiendo además el desmantelamiento de las redes de cobre de mediana y baja tensión, ahora remplazadas con cables de aluminio.
Todo esto, como parte de la opacidad y corrupción con que se manejaron Calderón y sus funcionarios. De ahí el por qué también les quita el sueño el que trascienda el contenido de la “caja negra” que revele los truculentos secretos de la extinción de Luz y Fuerza del Centro.