miércoles, 5 de septiembre de 2012

Sin mantenimiento el sistema hidrológico de Necaxa

A punto de colapso instalaciones eléctricas
El polvo y la incuria de acumula en todos lados
4 septiembre 2012 | Con información de Gaceta de la Sierra Norte
HUAUCHINANGO.- Trabajadores electricistas preocupados por la falta de mantenimiento en las instalaciones de las plantas hidroeléctricas así como la red hidrológica con más de mil 200 kilómetros cuadrados de ríos, arroyos, escurrideros de cañadas y manantiales de la Compañía de Luz y Fuerza (CLyF) advierten el colapso de todo el sistema.
Esto fue dado a conocer en pláticas informales con trabajadores de empresa hidroeléctrica construida hace más de un siglo y que, a un mes de cumplir tres años del decreto de Calderón que ordena su extinción y dejara sin trabajo a 44 mil trabajadores, más de 16 mil de ellos aún en resistencia que están en espera se les reintegre su materia de trabajo, urgen a iniciar la reparación de todas estas instalaciones.

Los trabajadores de la CLyFC, pertenecientes al Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) reconocido por las instituciones laborales como existente, señalaron el oprobio que la administración panista les encajó.

Con miles de familias de electricistas en resistencia, en plena depauperación en la sierra, muchos de ellos dedicados, desde sus propios domicilios, a la venta de comida, gelatinas, tortillas hechas a mano, y cualquier otro producto que les proporcione alguna entrada de dinero para su economía, el municipio de Juan Galindo, Huauchinango y otros de esta comarca serrana se debaten en la estrechez y la desventura.

Conocido como “Territorio SME”, principalmente la cabecera municipal de Juan Galindo, Necaxa, la insurgencia de los trabajadores se mantiene vigente y patente al grado de que cualquier reparación en las líneas eléctricas, acometidas en nuevos servicios y el mantenimiento de la red eléctrica se conserva por los buenos oficios de los afiliados al SME dado que los trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), no se aventuran por esos lares.

Mientras en los cauces de los ríos, vertederos, manantiales, túneles y cualquier otra obra de infraestructura hidráulica que fuera construida para canalizar el agua hacia las presas del complejo hidroeléctrico, acusan azolves por derrumbes, caída de árboles, ramas y maleza son arrastrados por las corrientes y provocan que en algunos sitios se arracimen y el agua así acumulada salga de madre.

De igual manera consideran que en el equipo de las plantas de luz el herrumbre se apodera de todo así como el polvo y plagas de ratas, murciélagos, ofidios, insectos y algún otro que hacen de esos lugares abandonados su refugio proliferan y abonan a la destrucción del equipo, mucho de éste con más de cien años de uso continuo, aceleran su deterioro y el colapso parece inminente, advierten quienes conocen todo el sistema.

Fuente: Gaceta de la Sierra Norte de Puebla