lunes, 18 de junio de 2012

A Calderón le debería “dar vergüenza hablar de progreso y justicia social”, dicen sindicatos

En la cumbre sólo exhibirá “cifras maquilladas de pobreza y desempleo”
Patricia Muñoz Ríos | Periódico La Jornada | Lunes 18 de junio de 2012, p. 31Al gobierno del presidente Felipe Calderón “le debería dar vergüenza hablar de progreso y justicia social” en el contexto de los trabajos del G-20 en Los Cabos, Baja California Sur, cuando ha instrumentado políticas que profundizaron la desigualdad en el país, elevaron las tasas de marginación y enviaron a la calle, a la economía informal o al desempleo a varias decenas de miles de ciudadanos, señalaron sindicatos de diversas corrientes.
En foros alternos que realizaron integrantes de sindicatos agrupados en la Coalición Mexicana Frente al G-20, gremios de todas las corrientes criticaron fuertemente la actuación del actual gobierno panista. También hicieron una amplia denuncia de las acciones del régimen que afectaron a la clase trabajadora mexicana.

Agrupados en foros sobre energía, feminismo, sector laboral, y otros con el mismo tema del G-20, representantes de los sindicatos de la UNAM, pilotos, sobrecargos, personal del tierra y confianza de Mexicana de Aviación, del Mexicano de Electricistas, Tranviarios, Telefonistas y decenas más de organizaciones hicieron un amplio listado de lo que consideraron “agravios” del presidente Calderón a la clase trabajadora.

También realizaron un recuento de los desempleados del actual régimen y particularmente hicieron un balance del retroceso que han sufrido los trabajadores y sus derechos laborales, como el ataque a la contratación colectiva de trabajo, la virtual desaparición de los contratos ley y las resoluciones ejecutivas y legales que han afectado a la clase obrera. Expusieron que el “gobierno mexicano busca en el G-20 maquillar una triste realidad: que los mexicanos, y particularmente los trabajadores, ahora viven peor y están en peores condiciones económicas que hace 6 años”.

La lista de agravios del gobierno panista, realizada por los sindicatos en estos foros, incluye, por entre otros: el caso de las viudas y huérfanos de Pasta de Conchos que siguen esperando justicia, tras casi seis años de luchar porque les entreguen los restos de sus mineros muertos; el caso del Pocito 3, donde los familias siguen esperando una pensión justa; el despido de los 44 mil trabajadores del SME; el acoso contra el sindicato Nacional de Trabajadores Mineros; el caso de Mexicana de Aviación; la demanda de los jubilados ferroviarios; la persecución a los sindicatos independientes de la Honda, de Vidriera del Potosí y la represión al gremio conformado por la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros.

Los sindicatos de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), del Frente Sindical Mexicano, Mineros, Tranviarios, y organizaciones como el Centro de Reflexión y Acción Laboral y la Asociación Nacional de Abogados Democráticos, que han participado en dichos foros, indicaron que al G-20 México “únicamente fue a hacer la pantalla”, a presentar cifras maquilladas de la realidad, cuando la pobreza, el desempleo y la inconformidad no se pueden ocultar.


Fuente: La Jornada