Estudio de la UNT revela que intenta evitar a toda costa la prórroga solicitada por el PRI
Patricia Muñoz Ríos | Periódico La Jornada | Lunes 20 de junio de 2011, p. 21
El gobierno federal está "desesperado" por aprobar la reforma laboral, sea la que sea; ya no le importa que se trate de la propuesta por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), y quiere nulificar la prórroga de 150 días solicitados por el tricolor para llevar a cabo el periodo de consultas de esta iniciativa. En un informe sobre la situación de la reforma laboral, elaborado por la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), se señala lo anterior y se apunta que hay una "fuerte presión del (presidente Felipe) Calderón y de (Javier) Lozano" para sacar a toda costa este proyecto.
El documento habla de que hay incluso una campaña montada por el gobierno federal para echar la culpa al PRI de "boicotear" esta reforma, ya que en cualquier foro donde tienen oportunidad el mandatario y el secretario del Trabajo indican que el tricolor está haciendo daño a México por no impulsar ésta y otras iniciativas.
"Los funcionarios están creando un esquema de mitos alrededor de la reforma laboral", indica este central, integrada por decenas de sindicatos independientes. Expone que el gobierno ha llegado a un nivel en el que quiere sacar una reforma, sea la que sea, e incluso el PAN manifestó estar de acuerdo en apoyar el proyecto del Revolucionario Institucional, con tal de que salga.
La UNT indicó que por el momento es muy difícil la posibilidad de que se instrumente la misma. En el remoto caso de que se aprobara un periodo extraordinario de sesiones, más bien serviría para discutir la reforma política, proyecto que también enfrenta un difícil camino, porque el priísmo quiere incluir una cláusula de gobernabilidad, para que el partido que saque la mayoría de votos, pero que no rebase 50 por ciento, automáticamente pueda tener la mayoría.
Según esta central obrera, para que realmente se pueda concretar la reforma laboral, el PRI tendría que eliminar 30 cláusulas que son las más perniciosas, y "son una verdadera agresión contra el derecho laboral". Además hay mucho interés en sindicatos del interior de la República por abrir audiencias públicas para analizar la propuestas de reforma. En las audiencias el tricolor se ha dado cuenta del costo político que les va a representar la misma, y eso los ha obligado a cambiar su posición, concluye este análisis.