viernes, 13 de mayo de 2011

Desestiman propuesta de FCH para Pemex

12 Mayo, 2011
Karol Garcia
Especialistas en el sector energético aseguraron que una reforma como la que anunció el presidente Felipe Calderón para hacer de Petróleos Mexicanos (Pemex) una empresa similar a Petrobras es imposible y que las palabras del Jefe del Ejecutivo reflejan indecisión, mientras que los bonos ciudadanos son una opción, para la que tanto Pemex como la ciudadanía deben ser muy cuidadosos.Acerca de transformar el régimen paraestatal de Pemex para convertirla en una empresa similar a Petrobras en la que coexisten capital estatal y privado, Miriam Grunstein, del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) , dijo a El Economista: “Desde el punto de vista de la capacidad de imposición y negociación que ha demostrado Calderón para reformar el sector energético es totalmente inviable”.

“Un presidente que ha sido tan temeroso de la palabra privatización, en este momento la está sugiriendo”, puesto que en el 2008, durante las negociaciones por la reforma energética, Felipe Calderón dijo no a la mínima entrada de capitales privados. “Entonces que anuncie algo tres años después refleja una imagen de un presidente que no sabe lo que quiere o que sí sabe, pero que no lo expresa en público para su ciudadanía, lo cual es muy grave”, enfatizó.

Al respecto, el experto en temas energéticos del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Duncan Wood, aseveró que el mensaje del Jefe del Ejecutivo estuvo dirigido a inversionistas y críticos neoyorquinos, para dar una imagen de estabilidad de México y de Pemex, pero que nada tiene que ver con la realidad ni con la dinámica existente entre el Partido Revolucionario Institucional y la Presidencia, que hace imposible pensar en una reforma de cualquier tipo antes de julio del 2012.

CONDICIONES PARA LOS BONOS
En cuanto a la emisión de bonos ciudadanos, el experto manejó dos escenarios: para Pemex, lo ideal sería emitirlos en pesos para que no le afecten las devaluaciones de la moneda, mientras que para los inversionistas sólo serán atractivos si se expiden a una tasa de entre 7 y 10% de interés y en dólares. Sin embargo, Duncan Wood aseguró que éstos no podrán rebasar 10,000 millones de dólares, puesto que la deuda de Pemex ya sobrepasa 48,000 millones y no está en condiciones de adquirir una obligación de tanto peso.