sábado, 9 de agosto de 2014

Prevén petroleros la desaparición del contrato colectivo y violación de derechos

Se redactó mañosamente el tercero transitorio de la ley de presupuesto
No indica que sea obligación del gobierno asumir el pasivo ni el porcentaje, dice la UNTPP
Patricia Muñoz Ríos / Periódico La Jornada / Viernes 8 de agosto de 2014, p. 8
El artículo tercero transitorio de la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, con el que la Cámara de Diputados y el Senado pretenden dar solución al pasivo laboral de Pemex, está mañosamente redactado, porque señala que el gobierno federal podrá asumir dicho pasivo, pero no indica que es obligatorio ni el porcentaje en que lo hará.
Un análisis elaborado por la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros (UNTPP) señala lo anterior y agrega que, “en realidad, será muy poco el porcentaje del pasivo laboral que asumirá el gobierno federal, y podría alcanzar sólo 25 por ciento del total si el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) –que encabeza Carlos Romero Deschamps– accede, como siempre lo hace, a todo lo que le pida la empresa”.

El análisis agrega que a cambio de asumir parte del pago de jubilaciones y pensiones, el gobierno pone como condición el desmantelamiento del contrato colectivo de trabajo y la desaparición de diversas cláusulas, porque la intención es limpiar la empresa para dejarla sin pasivos laborales para las trasnacionales que llegarán al sector petrolero y que éstas tengan a disposición mano de obra calificada, especializada y muy barata .

La UNTPP advierte en el análisis que además de que se prevé un recorte de personal, en la revisión del contrato colectivo de 2015 estarán en riesgo de desaparecer prestaciones de tipo económico, como apoyos por fallecimiento, invalidez, separación voluntaria y jubilaciones; pago por despido, ayuda de canasta, gas y gasolina, servicios médicos, primas de antigüedad, liquidaciones y bonos de productividad, entre otras.

Esto es porque en el artículo tercero transitorio se dice en forma literal que el gobierno federal podrá asumir una porción de la obligación del pago de pensiones y jubilaciones en curso, siempre que dentro del año siguiente a la entrada en vigor del decreto Pemex alcance un acuerdo para modificar el contrato colectivo y el reglamento de trabajo del personal de confianza, además de que las pensiones o jubilaciones de los trabajadores de nuevo ingreso sean financiadas con el esquema de cuentas individuales (afores).

La unión considera que el panorama a corto plazo (un año) no es nada claro para los trabajadores, ya que la empresa tratará de obligar al STPRM a que ceda en cuanto a las prestaciones laborales de tipo económico.

Además, acerca de la modificación del reglamento del personal de confianza, la empresa la tiene más fácil ya que la UNTPP no tiene contrato colectivo y poco podremos hacer para defender los intereses de nuestros agremiados. Es aquí donde la empresa podrá bajar el pasivo laboral al reducir o eliminar prestaciones económicas sin oposición de los trabajadores.

En cuanto a los trabajadores de nuevo ingreso, que serán canalizados al esquema de afores, éstos tendrán opción a jubilarse hasta los 65 años de edad y con pensiones raquíticas, lo cual provocará que haya empleados de más de 60 años trabajando en torres a 50 metros de altura o en plantas de proceso y plataformas, lo cual será altamente riesgoso.

En resumen, se está en vísperas del avasallamiento y la violación de los derechos laborales de los petroleros, a los que les quieren quitar la figura de patrón que tienen en Pemex, y desconocer los pasivos laborales y el contrato para que las empresas privadas que lleguen al sector paguen lo que quieran, con contratos mínimos o inexistentes.

Fuente: La Jornada - Política